La posibilidad de que el gobierno nacional impulse, al menos por un tiempo, incrementos de salarios a través de sumas fijas y, como tal, postergue para más adelante las negociaciones paritarias, genera nerviosismo y división entre los dirigentes de la CGT. Este complejo tema lo discutirán los integrantes de la mesa chica de la central obrera en un almuerzo que se realizará este mediodía en la sede del gremio de Sanidad que conduce el cosecretario general de la CGT, Héctor Daer. El menú incluirá además el análisis de otro ítem polémico para los sindicalista y que no es otro que la extinción de las cláusulas de revisión y gatillo que promueve la Rosada. 

Trascendió que el tiempo de suspensión de las paritarias sólo sería de 120 días pero ese plazo no diluye la diferentes posturas que tienen los gremios sobre la idea del gobierno que busca controlar la crisis económica. Esa falta de consenso entre los gremialistas llega incluso hasta el secretariado general. Por un lado, el dirigente del Sindicato de Obreros y Empleados de Estaciones de Servicio y cosecretario general de la CGT, Carlos Acuña, ya expresó su disconformidad al sostener que la central sindical “no avala las sumas fijas. Queremos la libertad de poder discutir. Siempre hemos tenido prudencia, pero eso no significa que no podamos discutir las cosas, porque nadie es dueño de toda la verdad”.

Acuña, un hombre referenciado gremialmente en Luis Barrionuevo y políticamente con Sergio Massa, reconoció que no le gusta la posibilidad de que se suspendan las paritarias. "No lo veo bien, porque tiene que ser conversado con los sectores y ver cómo nos ponemos de acuerdo. Sino, es decir que por culpa de los salarios hay inflación. Si hay alguien que perdió, es justamente el salario. Si no tenemos la posibilidad de discutirlo, vamos a ir más para atrás, en el sentido salarial, y no va a haber recuperación económica", dijo y agregó que "los empresarios son los que alguna vuelta tienen que poner el esfuerzo. Los trabajadores ya perdimos mucho en muchos años. Que ganen menos un tiempo, si esa plata vuelve al bolsillo de ellos con el consumo". 

Por ahora Daer no dijo nada pero se sabe de su cercanía con el presidente Alberto Fernández y como tal es posible especular que acompañará la propuesta del Poder Ejecutivo Nacional. Eso lo planteará en el almuerzo que organizó y que contará con nuevas presencias como la del taxista Omar Viviani.

El jefe de los peones de taxi no dejó trascender cuál será su posición. En primer lugar dijo que no escuchó a ningún funcionario de gobierno hablar sobre la suspensión de las paritarias y luego agregó que la situación de cada gremio es diferente: "Hay actividades que pueden discutir una paritaria que supere el índice de inflación y a otras les cuesta más porque están varadas o destruidas y por eso prefieren las sumas fijas"". En todo caso, Viviani prefiere que la CGT se inmiscuya en el control del programa de Precios Cuidados y evitar que empresarios continúen remarcando precios. "El problema real que subyace, y no puede resolverse en dos meses, es el proceso inflacionario que golpea los bolsillos de los trabajadores", concluyó Viviani.

Quien no participará del almuerzo, pero que siempre es tema de conversación de la conducción cegetista, es el jefe de los camioneros Hugo Moyano. El dirigente sindicial indicó en declaraciones radiales que continuará discutiendo su paritaria. "No estamos en contra de nada. Vamos a negociar nuestro convenio de acuerdo a que le permita al trabajador recuperar o mantener el poder adquisitivo del salario. No queremos opinar sobre las otras organizaciones gremiales", dijo antes de sostener que "no sé lo que quiere Alberto Fernández".