El tono subía entre los dos favoritos para la primaria de New Hampshire en Estados Unidos, en la víspera de una votación que se proyecta como crucial para la nominación, con fuertes intercambios de críticas entre el senador Bernie Sanders y el exalcalde Pete Buttigieg.
Durante 24 horas, este estado de la costa este va a estar en el centro del debate político ya que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tiene programado un mitin en la noche del martes en Manchester con la promesa de congregar a "multitudes" "Quiero sacudir un poquito a los demócratas", dijo en Twitter.
Para los candidatos demócratas esta votación se perfila como decisiva en la carrera hacia la Casa Blanca, especialmente para el exvicepresidente Joe Biden y la senadora por Massachusetts Elizabeth Warren cuyas campañas están de capa caída y aparecen rezagados en las encuestas.
Según un sondeo de la Universidad de Suffolk, el senador Sanders marca un 27 por ciento en las encuestas seguido por Buttigieg con 19 por ciento. "Creo que tenemos una excelente oportunidad de ganar", aseguró Sanders. Con el avance de las primarias, la amabilidad que regía entre los contendientes comenzó a disiparse.
"Estoy compitiendo contra un candidato, Pete Buttigieg, entre otros, que ha recibido contribuciones de más de 40 multimillonarios", dijo el veterano político de 78 años.
"Nuestro apoyo viene de la clase trabajadora de este país", señaló Sanders con respecto a su estrategia de recolectar pequeñas cantidades de donantes individuales, con las cuales sumó 25 millones de dólares el mes pasado.
Buttigieg, de 38 años, fue proclamado el domingo como ganador del "caucus" de Iowa, pero la serie de problemas que marcaron las votaciones opacaron su estrecha victoria frente a Sanders.
En respuesta al ataque de Sanders, Buttigieg replicó con humor y dijo: "Bueno, Bernie es bastante rico y yo aceptaría con gusto dinero de él".
Buttigieg dijo que iba a ser "mucho más difícil" para el partido ganar si Sanders es el candidato presidencial. Sanders se posiciona a la izquierda del espectro político en Estados Unidos, por su defensa de un sistema de salud público y su lucha contra el cambio climático, lo que hace que Trump lo critique y lo descalifique por ser "comunista".