La exsoldado Chelsea Manning (foto) y el activista Jeremy Hammond fueron puestos en libertad en la causa que investiga las filtraciones de Wikileaks. El juez federal de Estados Unidos Anthony Trenga determinó que sus testimonios ya no eran necesarios. También dio por concluida la labor del gran jurado en la investigación que involucra a Julian Assange. El año pasado la justicia había ordenado la detención de ambos tras haberse negado a testificar en la causa. Manning, de 32 años, se encontraba hospitalizada desde el miércoles después de haber intentado suicidarse en una cárcel del estado de Virginia.

Manning, una exanalista de Inteligencia del Ejército de Estados Unidos, fue la responsable de la mayor filtración de la historia del país, que consistió en miles de documentos clasificados sobre las guerras de Irak y Afganistán. También filtró cables del Departamento de Estado, lo que supuso un duro golpe para la diplomacia estadounidense. La exsoldado llevaba encarcelada desde mayo pasado por negarse a declarar sobre las filtraciones a WikiLeaks. "La comparecencia de Manning ante un gran jurado ya no es necesaria. Su detención no sirve ya para ningún propósito coercitivo", dictaminó el magistrado del Distrito Este de Virginia. Pese a la orden de liberación, el juez mantuvo la multa de 256.000 dólares por su negativa a dar testimonio.

La exanalista del ejército norteamericano había sido detenida en 2010 y condenada a 35 años de cárcel. Pero quedó en libertad en 2017 tras recibir un perdón presidencial que decretó el expresidente Barack Obama pocos días antes de dejar el poder. Durante sus más de siete años en prisión, Manning había intentado suicidarse en varias ocasiones, incluyendo dos en 2016. Este miércoles, tras un nuevo intento, sus abogados insistieron en que Manning ya había dicho que no traicionaría sus principios, incluso si existía el riesgo de perjudicarse a sí misma. Los letrados le pidieron a la prensa que le den privacidad mientras intentaba ponerse nuevamente de pie, según informó el sitio especializado Gizmodo.

Por su parte, Hammond permanecerá poco tiempo en libertad. El anarquista oriundo de Chicago, de 35 años, tendrá que volver a un centro penitenciario federal para cumplir lo que le falta de una condena de 10 años. Esa causa tiene que ver con las filtraciones realizadas a la firma de inteligencia Stratfor en 2012.

En tanto, el sitio Wikileaks celebró la puesta en libertad de ambos pero reclamó lo mismo para Julian Assange. “El Gran Jurado de WikiLeaks fue disuelto después de más de diez años. Chelsea Manning y Jeremy Hammond fueron liberados de sus maquinaciones coercitivas. Ahora deben retirar todos los cargos contra Julian Assange y liberarlo”, escribió el sitio en Twitter. Assange permanece en prisión en el Reino Unido. La justicia estadounidense tiene 17 acusaciones en su contra, incluidos cargos basados en la Ley de Espionaje. Si es extraditado y condenado en Estados Unidos podría enfrentar penas de hasta 175 años de cárcel.