Un grupo de casi 80 trabajadores golondrina de Salta y Jujuy sufrieron una espera de varios días en la localidad de Media Agua, departamento Sarmiento, de la provincia de San Juan, sin poder conseguir el permiso para trasladarse a sus lugares de origen, y sin ayuda de las autoridades de las provincias involucradas. Finalmente, ayer partió un micro a buscarlos, pero su capacidad es para 60, por lo que los restantes deberán continuar esperando que se abra la posibilidad de que los trasladen también a ellos. 

Ubicados en tres lugares de alquiler y en una de las fincas productoras de aceituna donde trabajaban, los obreros denunciaron ante Salta/12 que sufrieron el destrato del intendente de Sarmiento, Mario Gustavo Martín, que ni siquiera quiso atenderlos, y la indiferencia de las autoridades municipales de sus lugares de origen

María Carolina Guerrero, quien reside en Monterrico, Jujuy, contó que habló con su intendente, Nilson Ortega, pero no le dio ninguna respuesta. "Hablé con el presidente del Concejo, tampoco. Me dijo, 'no, solamente avisame vos cuando estén viniendo nosotros los vamos a ir a buscar, esas fueron las palabras de él", lamentó. 

Algo parecido le pasó a la periodista y militante feminista Marta César, quien colaboró para lograr que estas personas pudieran volver a sus hogares. En un intento por encontrar una solución hizo consultas con autoridades de Rosario de Lerma, ya que entre los cosecheros varados en San Juan hay habitantes de esa localidad. Los ex intendentes y actuales legisladores provinciales Ignacio "Nacho" Jarzún y Sergio "Topo" Ramos, ni siquiera respondieron a sus mensajes. El único que contestó fue el actual intendente, Enrique Martínez, que asumió el compromiso de hablar con autoridades provinciales y organizar algún tipo de subsidio para ayudar a los trabajadores que llegarán sin la ganancia de la temporada de cosecha de la aceituna, porque todo lo gastaron en la espera. 

Después de muchas gestiones, César consiguió ayuda de legisladores nacionales del Frente de Todos de Salta para tramitar ante el Ministerio de Transporte de la Nación el permiso de tránsito para el colectivo, que ya había sido contratado, que partió a buscar a 60 cosecheros ayer a la tarde. Hoy llegará a Media Agua, pero no se sabe la hora en que podrá emprender el regreso porque tiene que pasar por los controles de las autoridades sanitarias. De todos modos, la noticia de que podrán regresar alegró el atardecer de los varados, que ayer, ya con sus finanzas extenuadas, organizaron una olla popular para poder alimentarse. 

Sin embargo, 17 trabajadores golondrina de Salta y Jujuy deberán esperar por otro transporte, "así que vamos a tener que volver a hacer todo el historial de nuevo, para traer a ésos", indicó César. 

Domingo Cruz es de General Güemes. Todos los años va a San Juan para la cosecha de aceituna, que comienza a mediados de febrero. Este año se juntó con un grupo de ocho jujeños con los que compartió una habitación. Se confesó "desesperado por viajar" cuando recibió la llamada de Salta/12. Como los otros, llegó antes de que se decretara la cuarentena por el coronavirus

Media Agua es la cabecera del departamento Sarmiento, a 56 kilómetros de la ciudad de la capital sanjuanina. Es una zona donde hay fincas productoras de aceituna que los cosecheros suelen recorrer buscando la que ofrezca mejores condiciones para hacer una diferencia y regresar a sus hogares con alguna ganancia. Este fue un mal año, porque los días de alquiler y comida sin trabajo para ganar el jornal ya se consumieron lo poco que habían reunido

"Hace cuanto que estamos varados sin poder trabajar y gastando lo que teníamos para poder viajar y hasta ahora, nada. Lo último que nos queda es para el pasaje" y ya "nadie quiere gastar nada. Como ser hoy día, ya nadie se quiso hacer un pequeño guiso aunque sea para poder comer porque no tenemos ya los medios para poder seguir adelante", explicó Carolina Guerrero, la persona que logró armar una lista de trabajadores en situación similar y hacer una suerte de organización de contingencia para pelear el regreso. 

Entre los varados hay habitantes de Rosario de Lerma, de General Güemes, Pampa Blanca, Campo Quijano, dentro de Salta. De Jujuy, hay cosecheros provenientes de San Salvador, Monterrico, Perico, El Carmen. Aunque estos son datos provisorios, porque nadie sabe a ciencia cierta cuántas personas, y de que lugares, fueron a levantar la aceituna. Hace dos días el número de varados anotados era de 60, anoche orillaba los 80. 

Lo que tuvieron que pasar estos cosecheros exhibe también el maltrato laboral histórico al que son sometidos los trabajadores golondrina. En general, sus empleadores temporarios no les ofrecieron ni siquiera la posibilidad (en medio de la pandemia) de quedarse en las instalaciones de las fincas. El grupo que seguía pernoctando en la finca donde había cosechado recibió ayer el aviso de que debían desocupar la dependencia.