La Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 21 de mayo como el Día Mundial de la Diversidad Cultural para el Diálogo y el Desarrollo con el objetivo de reducir la polarización y los estereotipos, para mejorar el entendimiento y la cooperación entre las diferentes culturas. A su vez, busca animar al público en general y a las organizaciones de todo el mundo a que tomen medidas concretas de apoyo a la diversidad.

La ONU emitió un comunicado en el que planteó que tres cuartas partes de los mayores conflictos tienen una dimensión cultural. En este sentido, señaló como urgente “superar la división entre las culturas” con el fin de arribar a “la paz, la estabilidad y el desarrollo”. “El reconocimiento de la diversidad cultural -mediante una utilización innovadora de los medios y de las TIC en particular- lleva al diálogo entre civilizaciones y culturas, al respeto y a la comprensión mutua”, explicó.

Asimismo, la organización internacional recordó que la diversidad cultural es una “fuerza motriz” del desarrollo, no sólo en lo que respecta al crecimiento económico, sino como medio para tener “una vida intelectual, afectiva, moral y espiritual más enriquecedora”. De esta manera, sostuvo que la diversidad es un “componente indispensable” para reducir la pobreza y alcanzar el desarrollo sostenible.

El sector cultural en tiempos de pandemia

La ONU también advirtió por el impacto que está sufriendo el sector cultural en distintas partes el mundo a raíz de las medidas preventivas adoptadas para hacer frente a la pandemia del coronavirus. Siguiendo esta línea, indicó que las industrias creativas y culturales contribuyen con 2.250 millones de dólares a la economía global (3 por ciento del PBI mundial) y representan 29,5 millones de empleos en todo el mundo. Debido a esto, aseguró que no tomar medidas que rescaten el ámbito cultural y ámbito turístico podría generar consecuencias económicas “desastrosas”, profundizar las desigualdades y aumentar la vulnerabilidad de las distintas comunidades.

Sin embargo, rescató a la cultura como “fuente de resiliencia” durante esta época de confinamiento masivo y destacó que “miles de millones de personas” recurren a la cultura como fuente de “consuelo, bienestar y conexión”. Entre las actividades que crecieron se incluyen las visitas virtuales a museos y galerías, la transmisión de películas, así como también coros comunitarios a través de las redes sociales. “Las grandes crisis a lo largo de la historia a menudo han dado lugar a un renacimiento de la cultura y una explosión de nuevas formas de creatividad, tan vitales para el progreso humano”, concluyó.

El origen del Día Mundial de la Diversidad Cultural

El Día Mundial de la Diversidad Cultural para el Diálogo y el Desarrollo tiene su origen en 2001, cuando se aprobó la Declaración Universal sobre esta temática de parte de la UNESCO y luego, en diciembre de 2002, se oficializó el 21 de mayo como fecha conmemorativa mediante la resolución 57/249 de la Asamblea General de las Naciones Unidas.

En 2011, la UNESCO y la Alianza de Civilizaciones de las Naciones Unidas lanzaron la campaña “Haz un gesto por la Diversidad y la Inclusión” con el fin de animar a todas las personas del mundo a comprometerse y apoyar la diversidad mediante “gestos reales” en el día a día. 

Por último, en 2015 la Segunda Comisión de la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó por unanimidad la resolución sobre Cultura y Desarrollo Sostenible y así afirmar la contribución de la cultura a las tres dimensiones del desarrollo sostenible: reconocer la diversidad del mundo mucho más allá de lo natural y lo cultural, reafirmar que las culturas y civilizaciones pueden contribuir al desarrollo sostenible, y su papel como factores habilitadores cruciales.