El procurador general de la provincia, Abel Cornejo, insistió ayer en un plenario con 20 senadores en que hubo una falla en el Sistema de Emergencias y eso impidió que se asista a la maestra Rosa Sulca, asesinada la madrugada del 28 de abril, luego de que llamara al 911 avisando que estaba siendo atacada. E insistió también en que el diputado Gustavo Orozco intentó ejercer una presión sobre los fiscales que están investigando este hecho y sus vinculaciones.

El martes último este legislador había instado a la Cámara de Diputados a pronunciarse, por entender que la decisión de la Procuración General de crear una Unidad Especial para investigarlo por la supuesta presión constituye un avasallamiento a la inmunidad de opinión de los legisladores y a sus fueros

De esta manera, se reeditaron esta semana los cruces entre el titular del Ministerio Público Fiscal y el presidente de la comisión de Seguridad de Diputados. Orozco, que es policía retirado, reaccionó luego de que la Procuración creara una Unidad Especial para investigar la actuación policial en relación a este femicidio. Y contratacó acusando al fiscal penal Gustavo Torres Rubelt, que investiga el femicidio y no a la Policía, de haber filtrado el audio de la llamada de auxilio.

"Es la primera vez en la historia que una víctima llama para anunciar que la están matando", sostuvo ayer Cornejo en la reunión encabezada por el presidente del Senado, Antonio Marocco. Añadió que por tratarse de un hecho de flagrancia (dado que en el llamado queda claro que el delito se estaba cometiendo en ese momento) los policías que fueron hasta la casa de Sulca, en Villa Mitre de la ciudad de Salta, debieron actuar "de inmediato", sin esperar la orden judicial. En cambio, lo hicieron 16 horas después del crimen, ante la llamada de una vecina preocupada porque no había visto a la docente en sus actividades rutinarias. Según informó la Policía, el 911 avisó a la Comisaría 4º, dos policías comisionados para verificar llegaron a la vivienda, golpearon y como nadie atendía, se fueron, sin verificar que la persona que había pedido ayuda se encontrara bien. 

El procurador aseguró que en el Ministerio Público Fiscal "no hay una gestión antipolicial”, aunque se hayan detectado “serios escollos” para avanzar en algunas investigaciones. "Y en este caso, se desvía la atención del femicidio, que es el eje que debe preocuparnos”, aseveró e insistió en que  “la investigación del femicidio de Sulca tuvo interferencia y hubo obstrucción”.

Sobre el audio de la llamada, destacó que el fiscal se enteró de su existencia 16 horas después, cuando tendría que haber sido enviado inmediatamente por la Policía, y consideró que “nada del 911 puede ser secreto, porque la falta de auxilio y negligencias posteriores, obstruyen la investigación. Yo no quiero esa Policía, y no toda la Policía de Salta es así”, finalizó.

"Creo que es muy importante el fortalecimiento institucional, entonces expliqué claramente que se investigue a policías no significa cuestionar la institución, sino al contrario, que se pueda mejorar la institución”, sostuvo Cornejo luego, al referirse a la reunión, que no fue abierta. Y enfatizó: "Me parece que hubo un déficit importante del Sistema de Emergencias que hay que corregir".

En ese marco fueron detenidos, y ya liberados, los dos policías que, tras el pedido de auxilio, fueron hasta la casa de la mujer en Villa Mitre y después de golpear la puerta se retiraron sin verificar su situación.

"Han pasado muchas cosas"

“Han pasado muchas cosas que no deberían haber pasado y que francamente necesitan una expresión desde esta Cámara”, sostuvo el martes último el diputado Orozco al pedir a sus pares que se pronuncien sobre la decisión de la Procuración de investigarlo por sus dichos sobre el fiscal Torres Rubelt. "Creo que es inadmisible y es inaceptable que esta Cámara no se pronuncie en relación a lo que dijo Abel Cornejo”, aseveró. 

También fue insistente. En su caso, en que los dos policías que fueron a la casa de la víctima son inocentes. Dijo que tiene esta convicción sobre la base de informes que le "entregó en mano" el ministro de Seguridad, Juan Manuel Pulleiro. E interpretó que el Ministerio Público Fiscal de alguna manera reconoció que se equivocó al imputarlos. 

“No lo reconoció desde la palabra pero sí lo reconoció desde los hechos" porque luego de que él afirmara que podía haber errores en otros eslabones de la cadena de comunicación, "el MP no tuvo otra cosa que aceptar que teníamos razón y terminaron dándole la libertad a esos dos policías", sostuvo. De hecho, la Unidad Especial que investiga a la actuación de la Policía y al sistema de emergencias en relación al crimen de Sulca, luego imputó a otras cinco personas, tres policías y dos civiles. 

Orozco insistió en que se investigue quién difundió la grabación del pedido de auxilio de la víctima, y que haya sanciones. Según los informes de Seguridad, hay una alta probabilidad de que “se haya fugado de la esfera del Ministerio Público, de la esfera de esta fiscalía”, reiteró, antes de opinar que esta difusión perseguía “poner a la sociedad en contra de la Policía" y dañar al gobierno provincial. 

Ayer Cornejo respondió: “La inmunidad en el uso de la palabra del legislador me parece que no tiene nada que ver con esto, acá lo que hubo es claramente una injerencia en una investigación criminal sobre un femicidio y me parece que una operación para distraer a la opinión pública", aseguró. 

Alegó que los dichos por los que se investiga al diputado no fueron dentro del recinto, y añadió que, además, "hay que investigar si es que se usó la red interna de comunicación de la Policía para tratar de condicionar de alguna manera tabicar o sitiar la investigación que están llevando adelante los fiscales”.

Asesinatos con armas blancas 

En la reunión ayer en el Senado el procurador expuso también sobre los femicidios de JImena Salas y Leonor Giné; habló del protocolo de actuación para eventuales casos de muerte por coronavirus y la puesta en funcionamiento de nuevas fiscalías, como la de ciberdelitos, y la necesidad de poner en marcha los juzgados contravencionales.

Cornejo destacó que los femicidios de Sulca, Giné y Salas fueron cometidos con armas blancas, lo que para el jefe de los fiscales es "un tema sociológico y antropológico que tenemos que estudiar".

Sobre el caso Salas, puntualizó una serie de irregularidades en la investigación, entre las que citó que el primer fiscal no fue al lugar del crimen; no haber allanado el domicilio y buscado huellas; la autorización para cremar el cuerpo; no haber realizado una declaración en cámara Gesell con una de las hijas de la víctima que sufre autismo y, en general, haber archivado la causa por dos años.

Todo listo para la Covid-19

El procurador fue consultado por los senadores sobre los arreglos del área de medicina legal ante la posibilidad de que haya víctimas mortales provocadas por la pandemia del coronavirus. Confirmó que se seguirán protocolos europeos que indican que no se debe practicar autopsia a una víctima de la Covid-19 y debe ser inmediatamente cremada, aún sin presencia de familiares, para evitar la propagación del virus.

Afuera Cornejo ratificó que los médicos del MPF “están preparados” para actuar en caso de muertes por la Covid-19 y añadió que si las hubiera, los cuerpos serían “inmediatamente cremados para evitar cualquier tipo de contagio en la sociedad”.