La Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT) llevó 21 mil kilos de verduras a Villa Azul. Lo novedoso es que se trató de una compra directa del Ministerio de Desarrollo de la Comunidad bonaerense a los productores de la agricultura familiar. El compre estatal es muy difìcil de concretar para las organizaciones sociales, que están por fuera del circuito de las grandes empresas proovedoras de alimentos.  "Con esto se benefician las dos puntas: las familias trabajadoras de la tierra, que evitan la cadena de intermediación que hace negocio quedàndose con la mayor parte del precio,  y los vecinos de Villa Azul, que reciben un bolsón de verduras sanas y pueden pensar en alimentarse mejor que con sólo el paquete de fideos”, señaló Juan Pablo Della Villa, de la UTT.

La organización de quinteros lleva donados, desde que comenzó la pandemia, unos 100 mil kilos de verduras a comedores populares, como un mecanismo solidario que les permite, al mismo tiempo, hacer visible su propuesta política. Formada por familias de agricultores que viven bajo la línea de pobreza, básicamente porque deben alquilar los lotes que cultivan y vender su producción a bajo precio, la UTT reclama medidas que democraticen el acceso a la tierra y un paquete de apoyos oficiales del que es parte el compre estatal. 

"Nos interesa mucho destrabar la decisón política para que el Estado le compre también a la agricultura familiar. Nosotros venimos empujando esta forma de trabajo con los municipios, muy a pulmón, y este es el primer acuerdo que tenemos con la provincia de Buenos Aires. Cuando Andrés Larroque asumió el ministerio (de Desarrollo de la comunidad), hace veinte días, nos pusimos a disposición. Nos parece muy positivo que el estado cumpla su deber de abastecimiento con una lógica superadora a la de siempre", agregó Della Villa.

En la UTT sumaron a la compra una donación de dos mil kilos. El ministerio les encargó armar bolsas con los productos de estación: papa, zapallo, batata, cebolla, acelga, lechuga, apio. La distribución casa por casa quedó a cargo de los municipios de Avellaneda y Quilmes. 

Sus bolsones de verduras, como los de toda la agricultura familiar, vienen creciendo en ventas desde que comenzó la cuarentena, por efecto de las fuertes subas de precios registradas en las verdulerías. Sin embargo, en la UTT comentan que para los quinteros también es un momento ctico por el avance de las pandemia. Aunque no han tenido casos dentro de las familias de la organización, sí los hubo en la zona de los cinturones frutihortícolas de La Plata. Las condiciones de vida de la mayor parte de las familias de quinteros los hacen vulnerables porque en los contratos de alquiler de las tierras no se les permite levantar más que construcciones  precarias, que se puedan levantar finalizado el arrendamiento.

En el camino de construir otros modos de comercialización que beneficien a productores y consumidores, la UTT está armando una red de abastecimiento a los comedores populares. La semana pasada los convocó a armar una logítica de distribución compartida, para que las ollas populares puedan comprar verduras a precios no manipulados y que beneficien a los productores reales. Esta campaña incluye un llamado a la militancia, para cargar los camiones y armar los bolsones, de manera de no generar costos y llegar a los barrios con alimentos baratos.