Jorge Tisera es docente en la Escuela de Educación Técnica Nº 3161 de Chicoana, pueblo distante 48 kilómetros de la ciudad de Salta. En ese lugar vio que muchas familias campesinas no tienen acceso a servicios esenciales, como la energía eléctrica, y la conectividad digital, una herramienta indispensable en estos días para realizar algunas actividades, como participar con éxito en la educación formal. 

En ese contexto, Tisera pensó un proyecto para proveer de energía eléctrica a las casas de sus estudiantes con un panel solar, una batería para acumular la energía y, de paso, proveer también conectividad digital, con un modem router wifi que tome la señal desde un edificio público con conexión a la red. El proyecto Luz Social está participando en estos momentos del concurso Mentes Transformadoras de la fundación Nobleza Obliga que busca proyectos sociales innovadores, y este lunes se definirá si queda entre los tres finalistas del NOA

Tisera contó a Salta/12 que la iniciativa fue tomando forma desde el año pasado, cuando la Escuela fue invitada a participar del encuentro educativo Innova Técnicas Salta 2019, organizado por el gobierno provincial y donde se presentó un prototipo.

Ese proyecto inicial estaba basado en el concepto Litro de Luz. "Hicimos una casita con la botella de Moser (por el mecánico Alfredo Moser), que ilumina con la refracción solar, por medio del agua", recordó Tisera. Como es radioaficionado y tiene predilección por las energías alternativas, le agregó "un mástil con un panel solar con un modem router wifi y un handy”. Con esos elementos los visitantes de la muestra en el Centro de Conveciones de Salta podían conectarse al wifi ahí mismo y también podían hablar por radio desde el equipo que estaba en el mástil a otro que estuviera en cualquier parte del Centro.

Este año, el proyecto se presentó en el concurso Mentes Trasnformadoras y salió elegido dentro de los 20 del NOA,"y ahí empezamos a trabajar ya mucho más compenetrados de las necesidades del lugar y de la gente". 

El 29 participarán de la Semana de la Innovación Social 2020 de Mentes Transformadoras, un evento de 5 días en el que se presentarán los 120 proyectos seleccionados, entre ellos se elegirán a tres proyectos del NOA que seguirán en competencia. 

El premio para el ganador es de $100 mil, pero Tisera destacó que el concurso tiene otras ventajas, “permite en realidad hacerse conocer, conseguir alianzas estratégicas con empresas, voluntarios o gobiernos para que se impulsen los proyectos". 

Además de ser docente, Tisera se desempeña como inspector de la Secretaría de Ambiente de la provincia, y está interesado en los objetivos de desarrollo sustentable 4, (ODS 4), que propende a “garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover las oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos” de aquí a 2030.

Tisera destacó que investigando para el proyecto surgieron datos sobre la desigualdad que afrontan quienes viven en la ruralidad: "cinco de cada diez chicos de zonas rurales abandonan la escuela secundaria”. Además, investigadores de la Universidad Nacional de Salta elaboraron un índice de pobreza energética, a partir de información del INDEC. Da cuenta de que los niveles más elevados de pobreza energética se ubican en Salta, Formosa, Santiago del Estero, Misiones y Jujuy. "El 30% de las casas rurales tienen deficiencia de energía eléctrica", destacó Tisera y añadió su experiencia: "parte del abandono de los chicos, es lo que me pasa con mis alumnos", es que en horas diurnas tienen que salir a trabajar con sus mayores  y cuando regresan a sus casas ya no tienen luz y no pueden realizar sus tareas. 

En la Escuela Técnica 3161, "de una matrícula de 60 alumnos que se inscriben en el primer año del ciclo básico, solo llegan al último año, (...) un total de 10 alumnos, y de éstos solo terminan de cursar solo 6".

“Entonces la idea de llevar luz eléctrica por medio de paneles solares, llevar el wi fi, llevar las comunicaciones es que el alumno estudie, pueda presentar los trabajos en tiempo y forma, que no se atrase, que no pierda la promoción de cada materia y que no termine abandonando, porque yo tengo alumnos que tienen casi 20 años que repitieron tres o cuatro veces en la secundaria”, insistió. 

Para Tisera, llevar energía eléctrica e internet a estas familias, "le va a brindar tanto al alumno como a la familia tener la posibilidad de investigar, hacer los deberes; los padres, investigar otro tipo de relación laboral y ayudar a la comunidad toda por ejemplo en lo que es plantación de almácigos, riego inteligente, poner en venta un producto final y no una materia prima. A eso es lo que apunto yo con el proyecto”. El docente asegura que de esta manera se bajaría la deserción escolar en zonas rurales.

Un kit fotovoltaico 

Luz Social consiste en kits fotovoltaicos, cada uno consiste en un panel solar de 75W, una batería, un regulador de carga, un inversor, los cables y bornes, y un router wi fi. 

El panel solar y la batería servirían para alimentar cinco focos led, para "brindar (luz a) cinco ambientes, cargar una notebook o un celular, y con eso vamos a poder conectar una wi fi”, y se podría usar también una televisión de bajo consumo tipo led, según la estimación de Tisera. El router iría conectado a una antena exterior que a su vez estaría conectada a un edificio público, escuela, correo, sala de primeros auxilios, que tenga bajada de internet. “Es es es el proyecto original”.

"El proyecto Luz Social está basado en la conectividad entre una escuela o edificio público que disponga de un servicio de internet y pueda brindar un enlace a aquellos domicilios distantes mediante la conexión punto - multipunto", indica en el proyecto. En cada casa se debe instalar 

En cada casa debe ir uno de estos kits fotovoltaicos. El costo de cada uno es de unos $27 mil. "Si el gobierno no puede afrontar los costos para cada casa, se podría retomar la entrega de paneles solares por medio de Edesa”, propuso Tisera. En ese caso, el ahorro sería de $25 mil, dado que “lo más caro es el kit fotovoltaico que es el panel solar y la batería”, que se lleva casi el 90% del presupuesto.

El proyecto de Tisera cuenta con que las familias aún tengan las computadoras del programa Conectar Igualdad, o, en todo caso, que se use un teléfono celular.

El docente está en la búsqueda de apoyo para avanzar en la zona rural de Chicoana, pero hasta el momento no presentó la iniciativa ante ninguna instancia gubernamental. “Si mañana tenemos una acercamiento con algún gobierno provincial, municipal o nacional, el proyecto está disponible para ser desarrollado”, señaló.