El programa de Precios Máximos fue prorrogado hasta el 31 de octubre. Así lo comunicó la Secretaría de Comercio Interior a cargo de Paula Español. La anterior extensión había abarcado los meses de julio y agosto. La medida implica que los precios de buena parte del abanico de productos del consumo masivo siguen atados a los valores del 6 de marzo, más allá del incremento autorizado a mediados de julio.

“Lo que sucede en nuestro país se enmarca en un contexto de pandemia mundial que podría provocar, si no se adoptan las medidas adecuadas, una potencial crisis social sin precedentes, por lo que se deben tomar todas las medidas necesarias para morigerar su impacto en el sistema económico y asegurar a la población el acceso equitativo y razonable a bienes básicos de consumo”, justifica Comercio Interior en la resolución 254 publicada este lunes en el Boletín Oficial, por la cual extiende Precios Máximos.

El gobierno se mantiene firme en su postura de regular los precios de los bienes básicos en un contexto socio-económico muy delicado, con fuerte retracción del empleo, reducciones salariales y prácticamente sin negociaciones paritarias. Por otro lado, la Casa Rosada considera que, más allá de la suba paulatina del tipo cambio, los costos están relativamente estables gracias al congelamiento de los combustibles y de los servicios públicos. Adicionalmente, hay programas públicos como el ATP, que son un pilar de la demanda de los hogares y de la plantilla laboral de las empresas.

De todos modos, el sector empresario tiene fuerte rechazo a la política de precios máximos, ya que asegura que los costos subieron, en parte a raíz de la adopción de protocolos sanitarios, y que la rentabilidad está en franco deterioro o directamente en terreno negativo. De hecho, atento a ese reclamo, a mediados de julio el gobierno autorizó subas en los precios máximos que van del 2 al 4,5 por ciento promedio.

Todavía no se sabe si más adelante el gobierno autorizará subas en el marco de la nueva extensión del programa. Días atrás, en diálogo con este diario, Paula Español dijo que "en general, las empresas hacen solicitudes de ajustes de precios muy elevadas al momento de negociar. Tenemos demandas diversas que van del 10 al 30 por ciento, muy por encima de lo que podemos imaginar".

El programa de Precios Máximos incluye a los almacenes, autoservicios, supermercados chinos y cadenas de supermercados e hipermercados. El grado de cumplimiento es mucho mayor en grandes supermercados, que deben informar diariamente los precios al gobierno a través del Sistema Electrónico de Publicidad de Precios Argentinos (SEPA). Según los números oficiales, en los precios "el cumplimiento promedio a nivel nacional es del 80 por ciento" gracias a la realización de unas 22 mil inspecciones. 

Precios Máximos fue lanzado junto con el comienzo de la cuarentena, el 19 de marzo. Tuvo un primer plazo de vigencia de treinta días y se fue extendiendo en la medida en que lo hizo el aislamiento social obligatorio. El congelamiento de precios se prorrogó primero hasta el 20 de mayo, luego hasta el 30 de junio y posteriormente hasta el 31 de agosto, es decir, hasta este lunes. 

El control de precios permitió contener la inflación en alimentos y bebidas desde abril a esta parte. Según el Indec, luego de la suba del 3,2 por ciento en abril, muy superior al índice general de inflación, luego el rubro de alimentos y bebidas tuvo subas más moderadas, del 0,3 por ciento en mayo; 1,2 en junio y 1,3 por ciento en julio.

En paralelo a la renovación en el control de precios, Comercio Interior intimó a las empresas que forman parte integrante de la cadena de producción, distribución y comercialización “a incrementar su producción hasta el máximo de su capacidad instalada y a arbitrar las medidas conducentes para asegurar su transporte y provisión durante el período de vigencia de la presente medida”.