El juicio por el crimen de David Campos (28) y Emanuel Medina (32), acribillados a balazos durante una persecución policial en 2017 en la ciudad de Rosario, comenzó con el pedido del fiscal para que se condene a prisión perpetua a dos de los 19 policías acusados de violencia institucional.

En el inicio del debate, el fiscal Alberto Spelta solicitó en su alegato que se condene a prisión perpetua a los dos policías acusados de haber sido los autores de los disparos y a penas de entre 4 y 8 años a los otros 17 efectivos que participaron del procedimiento, a quienes acusó de encubrimiento y otros delitos.

El hecho ocurrió el 23 de junio del 2017, cuando Campos y Medina fueron acribillados a balazos cuando el auto en el circulaban chocó contra un árbol en Callao al 5700, de Rosario, luego de una persecución de varios patrulleros y motos policiales que se extendió por más de media hora.

Según testigos, al detenerse el Volkswagen Up en el que iban Medina y Campos, un grupo de policías que lo perseguía disparó varias veces contra el auto y los dos jóvenes murieron.

En un primer momento, la versión policial y judicial apuntó hacia un presunto enfrentamiento, atento a que en el auto chocado apreció un arma disparada.

La pesquisa determinó luego que había sido “plantada” por miembros de la fuerza para eludir su presunta responsabilidad.

De acuerdo con la investigación, los jóvenes habían salido a divertirse la noche anterior y regresaban a la mañana a sus casas cuando fueron interceptados por un control policial.

Aparentemente, al no detenerse, comenzaron a ser perseguidos por cerca de media hora en un recorrido de varios kilómetros en los fueron sumándose unidades del Comando Radioeléctrico y de la Policía de Acción Táctica.

“Tras colisionar y encontrándose ambos inmovilizados por el impacto, policías que arribaron al lugar abrieron fuego contra ellos, de manera indiscriminada, desobedeciendo los criterios de necesidad, racionalidad y proporcionalidad exigidos para el uso policial de la fuerza”, dijeron desde la querella de las familias Campos y Medina.

El fiscal Spelta pidió hoy, al iniciarse el juicio, la pena de prisión perpetua para los policías Alejandro Rubén Bustos y Leonel Emiliano Mendoza, señalados como quienes portaban las armas cuyos disparos mataron a los jóvenes.

Por abuso de armas, encubrimiento y falsedad ideológica, el fiscal pidió 8 años de cárcel para el policía Marcelo Adolfo Escalante, mientras que solicitó 7 años para otros ocho acusados por los dos últimos delitos.

Según voceros judiciales, Spelta solicitó finalmente al tribunal integrado por los jueces Hebe Marcogliese, Alejandro Negroni y Ramón Lanzón, 4 años de prisión para los restantes siete acusados.