Una organización narcocriminal a la que le fueron secuestrados 15 kilos de cocaína fue enviada a juicio oral, luego de que la Fiscalía Federal N°3 de Rosario, a cargo de Adriana Saccone, consideró completa la etapa de instrucción de la causa y se designe al Tribunal que juzgará a las ocho personas acusadas.

De acuerdo a lo postulado por el Ministerio Público Fiscal, Julio Andrés Rodríguez Granthon -apodado “Perú”, "Peruano" o “Coco”- fue el encargado de organizar al resto de los imputados para comercializar estupefaciente en la ciudad. Como se encuentra privado de la libertad en la cárcel de Piñero por otra causa, le habría dado órdenes a su “segundo” Iván R., conocido como “Loro”. En relación al caudal de material estupefaciente que operaba la banda, los propios imputados expresaron en las escuchas telefónicas ordenadas que la cantidad era de doce o catorce kilos por semana.  “Loro” mantenía al líder informado sobre la “contabilidad” del negocio. 

Otros dos hombres -Ramón L. y Claudio M.- y una mujer -Cristina M.- eran los encargados de distribuir el material estupefaciente entre quienes luego lo comercializarían al menudeo. Además, se logró detectar a las personas que habrían abastecido de cocaína a la organización investigada: Rodolfo Héctor M. y sus presuntos colaboradores Maximiliano A. y Sara B..

El 5 de noviembre del año pasado la Policía Federal realizó una serie de allanamientos. En un domicilio de Castellanos al 900 se secuestraron más de siete kilos de cocaína, distribuidos en igual cantidad de “panes”; similar cantidad se habían incautado el día anterior, en un procedimiento en la esquina de Amenábar y Bv. Avellaneda. Estaban en el baúl de un Peugeot 207. Los paquetes tenían el logo en bajo relieve de una corona –“forma en la que se suele identificar al clorhidrato de cocaína de máxima pureza”, precisó la fiscalía-, dinero en efectivo y teléfonos celulares. El propio Maximiliano A. tenía colocado un anillo dorado con el logo de una figura de una corona.

Desde su calabozo en el pabellón 9 de Piñero, el Peruano fue el organizador de esta gavilla. Tiene 27 años y aunque aun no está clara su participación, su nombre ganó espacio al surgir en la investigación por el asesinato del ex concejal Eduardo Trasante. Nadie seriamente cree que fue Isaías Zenón el mentor de ese crimen, a pesar de que su nombre es el único ligado al momento en la pesquisa, por haber mandado a comprar el auto con el que se trasladadaron los "soldaditos". "Es una mandadero ese pibe", según  un pesquisa. Las pruebas en su contra demoran en aparecer en el expediente de Trasante porque cuando entraron a requisar su celda partió en dos pedazos su teléfono celular.

Al Peruano lo ligan a la banda de Los Monos, por el caso de drogas por el que recaló en prisión, aunque está oficialmente inscripto en Argentina como piloto de avión civil y comercial.