Como un perreo en zona de guerra, la música de Mor0 es caliente y shockeante. Sin embargo, al hablar Mauro Guz Bejar es suave, ofrece té de manzanilla y conduce hacia su espacio de trabajo, un pequeño cuarto sin tratamiento acústico más que la capacidad de absorción de los materiales que yacen ahí: ampli, cables, pilas de papeles, teclados, una guitarra. Su seteo consta de una compu portátil, una placa Apogee Duet y dos tecladitos MIDI, “uno re chino y un M-Audio chiquito”. Es ingenioso su recurso “gasolero” del maple para huevos donde apoya la laptop a modo de refrigeración.

Su primer disco, el EP San Benito, publicado por el colectivo de artistas africanos NON Worldwide Records, lo mezcló con “los parlantitos del home-theatre” que le sacó del living a su madre, y recién cuando volvió de tocar en Estados Unidos pudo traerse unos monitores pequeños Genelec 8010. Ahora planea rendir la materia final de Jazz en el conservatorio Manuel de Falla, donde las clases de armonía y audioperceptiva, más allá de abrirle los oídos, lo volvieron consciente de los recursos que usa.

Mor0 produce tracks que repercuten en diversas latitudes y es uno de los djs residentes de las fiestas Hiedrah, que buscan “hacer visible la precarización del trabajo como productorxs de la noche y el estigma de la actividad nocturna” y “recuperar el espacio público, que es una zona de conflicto constante”, dice quien tendrá su último toque allí este viernes, antes de mudarse a Berlín.

Libres, el sabroso y “re violento” track que abre su EP, es una combinación de samples retorcidos, donde, por caso, el sonido de algo que parece una explosión es el de una persona tirándose al agua. “Todo el EP habla del agua, de los genes y los ADNs rítmicos que transporta. En el conservatorio leímos un texto que hablaba de los navíos como ecosistemas en movimiento y todas las variaciones musicales que se formaron al tener tripulaciones de diversos lugares del globo viajando juntas.”

Mor0 publicó el tremendo JKY para GHE20 G0TH1K, la fiesta y sello discográfico neoyorkino que, con una visión política clara revoluciona el underground de la Gran Manzana. Pero sus planes no terminan ahí con esa casa disquera que “es como la fiesta madre de la Hiedrah”. Tiene listo un edit que combina el estribillo downpitcheado de Love Don’t Cost a Thing, de J LO, con un a capella de Marilyn Manson y sonidos de golpes del Mortal Kombat. Además de estar trabajando en su nuevo disco, inspirado en movilizaciones sociales de todo el mundo, que quiere listo para nuestro invierno. Ahí, falsas cortinas de flashes informativos anteceden a ritmos que suenan como “cuando la calle se llena de gente con un objetivo en común”.

* Viernes 7/4 en Hiedrah Club de Baile, Beatflow, Córdoba 5509. A las 23.55.