La Subsecretaría de Acciones para la Defensa de las y los Consumidores (SSADC), que depende de la Secretaría de Comercio Interior de la Nación, identificó un descenso de ofertas engañosas en las empresas que participaron del Cyber Monday. El dato surge de la comparación con los relevamientos e imputaciones realizados durante el Hot Sale de julio pasado.

En las dos ocasiones, la Subsecretaria relevó los precios publicados por más de 150 empresas durante el mes anterior a la semana de ofertas para verificar que se respeten los valores y las condiciones promocionadas por el evento virtual, organizado por la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE).

En el último Cyber Monday, que estuvo vigente los primeros días de noviembre, se detectaron únicamente presuntas infracciones menores a la Ley de Defensa del Consumidor (24.240) por parte de diez proveedores, de los rubros de electrónica e informática; farmacia; ropa y accesorios; indumentaria deportiva; y artículos para bebés. Las infracciones detectadas refieren a que las ofertas mostraban precios superiores a los que efectivamente existían los días previos, a ofertas idénticas a las que se proponían semanas anteriores y a productos mal identificados que inducían a la confusión o engaño. 

En tanto, la Subsecretaría destacó que "varias de las empresas imputadas por su accionar en el Hot Sale 2020 de julio, un total de diecisiete compañías, modificaron sus conductas y no registraron incumplimientos durante este Cyber Monday". Es que luego de las imputaciones realizadas durante el Hot Sale, se realizó una capacitación en coordinación con la CACE respecto a las obligaciones de los proveedores de acuerdo a la Ley Nº 24.240.

En los días previos a la semana de oferta, además de verificar los precios, la SSADC elaboró una serie de recomendaciones para antes, durante y después de la compra y darle información a las y los consumidores para que puedan realizar las operaciones con seguridad y hacer valer sus derechos. Entre la mismas, se destacan la verificación de que las páginas web sean seguras (que comiencen con https://); tener en cuenta que no puede haber diferencias de precio entre efectivo, débito y crédito en un pago; y la información de que el consumidor cuenta con diez días desde la transacción para arrepentirse de la compra por internet.