Enfermeras y enfermeros porteños vuelven a salir a la calle este jueves para reclamar el reconocimiento a la carrera profesional y mejores salarios. Los trabajadores nucleados en la Asociación de Licenciados en Enfermería (ALE) realizarán una caravana a las 16 desde la sede de la TV Pública, ubicada en la avenida Figueroa Alcorta 2977, hasta el domicilio del jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, también en el barrio porteño de Palermo. Al mismo tiempo, la organización anticipó que ante la falta de respuesta a sus reclamos las medidas se profundizarán con un acampe en la 9 de julio el 21 de diciembre.

La marcha, en la que volverán a exigir al gobierno porteño que los incorpore a la carrera profesional y que les otorgue una recomposición salarial, fue difundida a través de un comunicado de prensa con el título "Todo el país va a ver la Enfermería acampando en la 9 de Julio por la falta de respuestas".

El reclamo de las y los licenciados en enfermería, en bioimágenes o los licenciados en instrumentación quirúrgica, es, a esta altura, histórico. La carrera de profesionales de la salud se creó hace 30 años cuando ya había licenciados en enfermería, pero quedaron excluidos. En 2018 se derogó la ley y se hizo una nueva, la Ley 6.035, y volvieron a quedar afuera. Por eso, para ALE, el Gobierno de la Ciudad sigue discriminando a los licenciados no sólo en enfermería sino en bioimágenes o los licenciados en instrumentación quirúrgica.

“Esenciales para enfrentar la pandemia de coronavirus y dentro de poco con el operativo de vacunación; pero (el Jefe de Gobierno Horacio Rodríguez) Larreta nos considera descartables”, denunciaron desde la organización en el comunicado de prensa.

Carolina Cáceres, referente de ALE consideró que “el poder político de CABA, con el Jefe de Gobierno y su ministro (Fernán) Quirós, hizo marketing con la salud pública durante todo el año. Sin embargo, la precarización de la enfermería es abrumadora con salarios de miseria".

En el mismo sentido, Andrea Ramírez, enfermera del Hospital Ramos Mejía, dijo que “este fue un año impresionante, dramático; el coronavirus nos expuso y tuvimos casi 200 compañeros fallecidos en la primera línea. Fuimos esenciales durante toda la pandemia y dentro de poco con el operativo de vacunación: pero Larreta nos considera descartables".