Los camaritas Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi recurrieron a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para denunciar al Estado argentino y pedir que se suspenda el concurso para cubrir las vacantes de la Sala 1 de la Cámara Nacional de Apelaciones al que ellos mismos incluso decidieron presentarse. Para los jueces designados a dedo durante la gestión de Cambiemos, que sus cargos deban ser concursados implica "una remoción política".

En el escrito presentado ante la Secretaria Ejecutiva interina de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) María Claudia Pulido,Bruglia y Bertuzzi  pidieron que se dicte una medida cautelar de carácter urgente para suspender la tramitación del concurso tendiente a ocupar las vacantes de los cargos en la Cámara Federal “de los que estamos siendo destituidos”, expusieron en su denuncia.

“Hemos sido removidos por la política de nuestros cargos de Jueces de la Cámara Federal de la Ciudad de Buenos Aires, vitales para quienes manejan actualmente el sistema del poder" comienza el comunicado para, luego, sentenciar que “los motivos pueden ser varios, sin descartar la venganza, búsqueda de impunidad o simplemente obtener cargos del esquema central del poder judicial”, agregaron los dos jueces.

Los magistrados, además, apuntaron contra Alberto Fernández. “Es difícil pensar que el Presidente de la República Argentina no se encontraba especialmente inquieto o constreñido para desalojarnos de los despachos”, expusieron en el escrito ante la CIDH.

En el cierre de la denuncia, los dos jueces designados a dedo solicitan la nulidad de lo resuelto por el Consejo de la Magistratura "por violar la seguridad jurídica, afectar la irretroactividad y la estabilidad de los actos administrativos firmes y consentidos, que generaron derechos subjetivos y que sólo podían ser cuestionados por la vía judicial”.

Cabe recordar que tanto Bruglia como Bertuzzi fueron trasladados desde el Tribunal Oral Federal (TOF) 4 a la Cámara Federal de Apelaciones sin mediar concurso durante el macrismo. Cuando el Consejo de la Magistratura dijo que sus traslados habían sido irregulares, los jueces llevaron el caso a la Corte, que aceptó tratar el tema en tiempo récord por entender que se trataba de un asunto de gravedad institucional. 

La mayoría de la Corte consideró que Bruglia y Bertuzzi deben quedarse en la Cámara hasta entonces se sustancie un nuevo concurso. Hace un mes atrás, se inició el procedimiento formal para cubrir estos cargos comenzará, según anunció el presidente del Consejo de la Magistratura, Alberto Lugones, y se espera que el proceso no dure más de ocho meses.