El balance financiero de 2020 arrojó que el dólar oficial subió de 62,99 a 87,97 pesos en el acumulado del año. Se trata de un incremento del 42,8 por ciento. La cifra se ubica por encima de la inflación que será en el mismo período cercana al 36 por ciento.

A lo largo del año hubo distintas tensiones macroeconómicas, financieras y cambiarias que llevaron a la adopción de medidas dinámicas para controlar las presiones con el tipo de cambio y evitar una devaluación abrupta del dólar comercial.

Entre las medidas adoptadas se incorporaron nuevos impuestos a la compra de dólares para ahorro y turismo. Por este motivo el tipo de cambio para atesoramiento cotiza un 65 por ciento por encima del dólar comercial y se ubica al cierre del año en 148,45 pesos. Esos aranceles corresponden en 30 puntos porcentuales al impuesto País y en 35 puntos porcentuales al pago a cuenta de ganancias.

El tipo de cambio mayorista –con el que operan exportadores e importadores- pasó en el año de 59,82 a 84,15 pesos. Es decir, un incremento del 40,6 por ciento. Esta variación también estuvo por encima de la inflación permitiendo que el tipo de cambio real no se aprecie en línea con uno de los objetivos del equipo económico para 2020.

Con el correr de los meses hubo distintas presiones con el dólar financiero tanto en la cotización informal como en la que se opera a través de la compraventa de bonos (contado con liquidación). El dólar paralelo pasó este año de 78,5 a 166 pesos. Se trata de un aumento del 111 por ciento en el acumulado de enero a diciembre.

Por el lado del contado con liquidación la cotización se movió de 78 a 140 pasos marcado un alza de 79,5 por ciento. A finales de octubre este tipo de cambio financiero que usan los inversores para retirar activos del mercado interno hacia el extranjero había marcado un pico de 181 pesos. En ese momento el dólar ilegal también tocó un record de 195 pesos.

Los anuncios del equipo económico en los últimos dos meses fueron claves para reducir la volatilidad y moderar la brecha cambiaria. Se incrementó la colocación de deuda en moneda local, se avanzó en una política de armonización de tasas, se modificaron los permisos para la compra de divisas y se solicitó a los privados refinanciar deuda en dólares, entre otros.

En la última jornada del año el dólar paralelo avanzó un peso y el contado con liquidación se mantuvo en el mismo valor de 140 pesos del día previo. Esto muestra el fracaso de los consultores que pronosticaron un dólar arriba de 200 pesos para este año.

En el Banco Central además cerraron la última rueda de operaciones de 2020 con una compra de divisas de más de 90 millones de dólares. 

Fue uno de los valores más elevados de las últimas semanas y permite a la autoridad monetaria terminar por primera vez en meses con resultados positivos en su intervención en el mercado cambiario.

En diciembre el Central adquirió, según fuentes del mercado, más de 500 millones de dólares en operaciones de intervención. La cifra contrasta contra la pérdida de más de 1000 millones de dólares en noviembre y más de 1600 millones en octubre. Este cambio de tendencia es clave para recuperar reservas internacionales.

Acciones y Bonos

Las cotizaciones de las acciones de la bolsa porteña terminaron 2020 con una suba anual de 22,9 por ciento. Aunque hubo empresas que llegaron a subir casi 120 por ciento. La de mejor performance en el MerVal fue Mirgor con un incremento de 118 por ciento.

En la bolsa de Nueva York las firmas locales que mejor desempeño registraron fueron las tecnológicas. MercadoLibre avanzó 198 por ciento y Globant lo hizo al 105 por ciento. Ternium por su parte ganó 35,4 por ciento.

El resto de las compañías continuaron en caída en un contexto complejo por la incertidumbre en la actividad económica ocasionada por el coronavirus. Las acciones que más cayeron fueron las del Banco Macro (-56 por ciento) y las de YPF (-57 por ciento).

Por el lado de los bonos soberanos el 2020 anotó una nueva reestructuración de la deuda argentina con acreedores externos y locales provocada por el despilfarro de endeudamiento de los tres años previos. Los nuevos títulos públicos ofrecidos tras el canje por el momento mantienen un nivel de paridad bajo y cotizan al 40 por ciento de su valor.

El riesgo país se posiciona en 1372 puntos, contra los 1947 puntos de diciembre del 2019. Las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional pautadas para el 2021 pueden ser uno de los incentivos para el repunto de los bonos soberanos, según analistas del mercado.