Punto y coma
Instaladas en una gozosa heterodoxia y con un innegable aire místico no exento de nostalgia, los últimos libros de Alejandro Modarelli van encontrando su lugar en el espectro de la crónica latinoamericana. La noche del mundo suma estampas diversas, notas personales y el recuerdo de Pedro Lemebel como sus puntos más altos.
