El rector de la Universidad Nacional de Rosario, Franco Bartolacci, y la presidenta del Conicet, Ana María Franchi, firmaron un convenio de inversión conjunta para la construcción de los laboratorios del Instituto de Procesos Biotecnológicos y Químicos (IPROBYQ) --que funciona desde 2014-- y la Incubadora UNR. De esta manera, la casa de altos estudios y el Centro Científico Tecnológico del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas invertirán 30 millones de pesos para la construcción de los espacios que estarán emplazados en la Ciudad Universitaria. “Esta obra permitirá que los investigadores puedan trabajar en un lugar mucho más confortable y en condiciones dignas. Acá hay un apoyo a la ciencia y la tecnología”, aseguró Franchi.

Se trata de un edificio de 600 metros cuadrados que estará vinculado con el espacio de la UNR Innova y contará con tres plantas; dos, destinadas a la sede del IPROBYQ; y una para la Incubadora UNR. La obra tiene un presupuesto inicial de 30 millones de pesos que serán financiados por la universidad y el Conicet.

“Poder cumplir con estos objetivos significa saldar una deuda histórica, la de garantizar condiciones de trabajo, de estudio, de producción científica acorde a los desafíos y a la excelencia de los institutos de doble pertenencia que tenemos”, dijo el rector. En ese sentido, señaló que este acuerdo significa un hecho concreto en el desarrollo de la incubadora de la UNR que se inscribe en el contexto del edificio UNR Innova, que será inaugurado en marzo y que alojará todas las actividades de ciencia, tecnología e innovación.

Por su parte, Franchi señaló: "El año que pasamos, tan triste, demostró para qué estamos. La comunidad cientifica no se hace de un día para el otro, es una construcción. No hubiéramos podido sin esta comunidad que resistió a muchos embates. Acá hay un cambio de política, un apoyo a la ciencia y la tecnología". En cuanto al convenio con la UNR consideró que significa lograr una sede propia de un instituto que tiene una gran actividad de transferencia hacia el sector privado y remarcó que "la educación, la ciencia y la tecnología son una inversión". Bartolacci coincidió al decir que "no hay decisión más transformadora que invertir en educación, ciencia y tecnología". 

El rector sostuvo que el convenio "garantiza la posibilidad de que el IPROBYQ, que es uno de nuestros institutos de excelencia, pueda tener un espacio propio y a su vez la posibilidad de que la UNR comience a trabajar en el marco de su propia incubadora, que era un desafío pendiente". En ese sentido, planteó que se "ratifica este camino para garantizar todos los días mejores condiciones de trabajo, estudio y producción de ciencia en nuestra comunidad, para poner en valor nuestro patrimonio; y para seguir garantizando más ciencia local y argentina para el desarrollo. Quizás como nunca antes la emergencia puso en evidencia el valor de la universidad pública, del sistema científico tecnológico nacional. Queremos seguir invirtiendo aún con las complejidades del contexto".