El presidente, Alberto Fernández, recibió fuerte apoyo de la Cepal durante su visita a Chile y en la antesala de su presentación ante el Foro Económico Mundial de Davos. El mandatario hizo una férrea defensa del multilateralismo, con críticas implícitas a Donald Trump y apoyo al flamante presidente norteamericano Joe Biden. Pidió un “capitalismo más humanitario” y por mayor unidad en la región. Lamentó que la falta de coordinación entre los países vecinos "resta fortaleza para dar la pelea global por el acceso a las vacunas contra el coronavirus".

Fernández fue recibido por la jefa de la Cepal, Alicia Bárcena, quien ofreció un encendido discurso de apoyo al gobierno argentino. No solo subrayó los logros de gestión y le pesada herencia recibida sino que le ofreció un guiño al mandatario, fan del rock nacional, al citar durante su presentación canciones de Lito Nebbia y a Luis Alberto Spinetta. Incluso consideró que "lo que está haciendo la Argentina, no lo hizo nadie", al referirse a la Prestación Básica Universal (PBU), que rige en el país para los servicios de telefonía fija, móvil e internet.

La titular de la Cepal describió que Fernández asumió la presidencia “con una situación económica muy delicada, con dos años de recesión y crisis de balanza de pagos sin tregua, con aumento del desempleo y la pobreza, junto a la mayor deuda pública de América latina y el Caribe y en virtual cesación de pagos. Sobre esa situación apareció la pandemia, lo cual configuró un contexto que no podía ser más adverso”.

Bárcena elogió la reacción del gobierno frente a la crisis de 2020. “Se desplegó un paquete de ayuda cuya magnitud estuvo al altura de los países que contaban con un mayor margen fiscal. Ustedes apoyaron a la oferta con fondos para las empresas y a la demanda con el ingreso de emergencia, que alcanzó a 9 millones de hogares. Lograron la reestructuración de la deuda pública con acreedores privados en moneda extranjera y consiguieron una importante reducción de la tasa de interés y un alivio muy fuerte de los vencimientos de los próximos cinco años. Esto no solo le da sustentabilidad de deuda sino que va a ser crucial para apuntalar la recuperación pospandemia. Además, están manteniendo un diálogo fructífero con el FMI y han logrado hasta aquí evitar la sobrecarga del sistema de salud”.

Además, la jefa de la Cepal valoró el acuerdo de Argentina con México para la producción de la vacuna de AstraZeneca. “Es histórico, porque es la única empresa del mundo que está compartiendo su desarrollo con países en vías de desarrollo para producir conjuntamente vacunas. Y esto se da en un contexto de carrera de entre vacunas y de concentración grosera por parte los países desarrollados. El tema del acceso a las vacunas va a abrir una gran grieta entre el norte y el sur”, indicó Bárcena.

En su discurso, Fernández citó en varias oportunidades al Papa Francisco y apoyó la idea del reimpulso al multilateralismo, que quedó dañado luego de la gestión de Trump. “Quedó al descubierto la importancia del multilateralismo partiendo desde el principio de solidaridad. Necesitamos un capitalismo más humanitario, porque quedó claro que las bases económicas que el mundo tenía antes de la pandemia no eran sólidas y que las bases sociales eran débiles. La injusticia y la desigualdad quedaron al descubierto. Pedían el ajuste y la eliminación del déficit y a la hora de la verdad tuvieron que salir a socorrer a todos para evitar un derrumbe generalizado”, dijo el presidente argentino.

Alberto Fernández va a participar este jueves del Foro Económico de Davos, que reúne a la crema del establishment global, con la presencia de los más altos mandatarios junto a los representantes de las empresas más importantes del mundo. Se espera que Fernández siga la tónica ensayada en la Cepal, con eje con el multilateralismo, la cooperación, el rostro humano del capitalismo en lugar de la financiarización creciente y el cambio climático.

Por otro lado, Fernández pidió por una mayor unión regional, proceso que quedó en punto muerto con la presidencia de Jair Bolsonaro en Brasil. "América latina se ha dividido por cuestiones ideológicas y así nos postergamos. Esa falta de unidad nos quita fuerza para discutir. Si hubiéramos estado unidos, por ejemplo, nuestra presión para exigir vacunas hubiera sido mayor", cerró.

También crítico a la oposición diciendo que "del otro lado me proponían sacar derechos. Uno de esos derechos era el del acceso a la educación pública que es uno de los mayores orgullos". Destacó en esta materia la gestión de Sarmiento y Alberdi, en el siglo XIX, pasando por Perón hasta llegar a las universides del Coburbano.