El presidente Alberto Fernández lo planteó como una de sus aspiraciones desde la campaña: reemplazar un gobierno de CEOs por uno de científicos. En ese sentido, la jerarquización de la tarea de las instituciones que trabajan en esa área y la pandemia de coronavirus se combinaron para que esa aspiración dé resultados: El Conicet está trabajando junto a la Universidad del Litoral y a la de San Martín en el diseño de una vacuna argentina con una estrategia innovadora.

"Estamos apoyando desde hace algunos meses el trabajo de dos laboratorios. Uno de la Universidad del Litoral y el otro de la Universidad de San Martín, que junto al Conicet están desarrollando una vacuna en base al uso de una la proteína recombinante" dijo el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva al programa #Caimialaseis que se emite por AM750.

 "Es una estrategia diferente a la que están usando las distintas vacunas, pero es una plataforma que está usando Novavax y está en fase 3. Es una estrategia interesante, directamente inocular una proteína para que el cuerpo humano produzca los anticuerpos. No se trata de dar un virus ni el material genético sino que es una proteína que recubre al virus para que directamente nuestro cuerpo genere anticuerpos", se entusiasmó el ministro, un convencido de que aunque aún no haya plazos para su finalización y probablemente tenga que ser producida en otros países, es importante que Argentina diseñe su propia vacuna.

"Ese desarrollo argentino alcanzó un grado avanzado y ahora hemos conseguido un socio nacional que tenga la capacidad de producirla", agregó Salvarezza y contó que "en estos días estamos analizando el cronograma porque es importante que argentina pueda diseñar una vacuna".

Las otras vacunas

Consultado sobre los problemas que el mundo está teniendo para conseguir un bien preciado y escaso como la cura del coronavirus, Salvarezza dijo que "uno ve que los laboratorios están bajo una fuerte tensión. Esto hace que en muchos casos no se pueda alcanzar la proyección de la entrega de vacunas a los distintos países. Esto está pasando con todas las vacunas, la vacuna de Pfizer tiene inconvenientes de suministros en todos los países. En el caso de la producción de Oxford, también está siendo cuestionada por la demora. Y respecto de la vacuna de Sputnik V también hubo una demora, pero hay una confirmación por parte del fondo ruso de inversión de que se van a cumplir los compromisos y de que hay una demora de unas semanas, pero  se van a entregar"

El ministro agregó que la vacuna de Oxford que se fabrica en el país no tiene ninguna demora y que ya ya salieron las 6 millones primeras dosis que se enviaron a México para su envasado y que en los próximos días van a salir otras 6 millones de dosis "que esperamos que estén para marzo porque la producción viene muy bien". 

El ministro también habló del resto de los desarrollos científicos que están ayudando a combatir la pandemia: el plasma de pacientes recuperados y el suero equipo, por poner sólo dos ejemplos de lo que se puede hacer cuando se invierte y se apuesta a un sector clave en un momento tan crítico.