Desde que comenzó la temporada de la NBA, los Dallas Mavericks evitaron tocar el himno nacional de Estados Unidos antes de los partidos, a diferencia de lo que ocurre en el resto de los estadios de la Liga. La decisión corrió por parte del dueño de la franquicia, Mark Cuban, que confirmó la ceremonia no se llevará adelante en ningún encuentro que se dispute en el American Airlines Center. 

Desde el lunes, cuando se enfrentaron ante Minnesotta Timberwolves, los Mavericks comenzaron a recibir un grupo reducido de aficionados para sus juegos en casa, por lo que se esperaba que la ceremonia del himno se volviera a realizar. Sin embargo, eso no ocurrió y fue el propio Cuban el que decidió que no se hiciera más, previa consulta con el comisionado de la NBA, Adam Silver. 

Cuban, uno de los dueños más polémicos de la NBA pero a la vez con muchas actitudes destacables, no aclaró los motivos de está decisión y no hubo ninguna explicación oficial, pero todo indica que se debe a que en la temporada de la NBA se ha implementado un reglamento en el que se requiere que los jugadores permanezcan de pie durante el himno, más allá de que el comisionado destacó que no se obligó a nadie a hacerlo ni se implementaron multas.

En su momento, Cuban había mencionado que los Mavericks no tendrían problema con mantener las protestas durante el himno siempre y cuando fueran hechas con respeto. "Ya sea que levanten el brazo en el aire, que se arrodillen, sea lo que sea, no creo que se trate de una cuestión de respeto o falta de respeto a la bandera o al himno o a nuestro país. Creo que esto es más un reflejo del compromiso de nuestros jugadores con este país y el hecho de que es tan importante para ellos que están dispuestos a decir lo que hay en su corazón y hacer lo que creen que es correcto", había sido el mensaje de Cuban.