El economista Marcos Buscaglia publicó una nota titulada “Los terraplanistas de la economía manejan hoy el país”. Una serie de lugares comunes astronómicos, combinados con la mención a la vuelta al mundo de Magallanes y la redondez de las fotos de la tierra tomadas desde fuera de la atmósfera, le bastan al economista para hablar con sorna de los terraplanistas. Ignora que los defensores de la tierra plana plantean su circularidad, hecho compatible con la vuelta de Magallanes y las fotos conocidas de la tierra desde su exterior. Justamente, esos puntos fueron explotados por un famoso terraplanista británico que ofreció 10.000 euros a quien le demuestre que la tierra es redonda con una foto, sin que nadie pudiera lograrlo. Las demostraciones de la redondez de la Tierra requieren observaciones más sofisticadas, como el hecho de que las estrellas giren en los polos sur y norte en sentidos inversos o los distintos tamaños de las sombras que proyecta el sol en un mismo momento en diferentes latitudes de la Tierra, hecho que uso Eratóstenes milenios atrás para medir su tamaño.

La misma superficialidad embuida de soberbia lo lleva a comparar al terraplanismo con las teorías económicas que sostienen que la emisión monetaria no genera inflación, ideas que atribuye, con escasa razón, a las actuales autoridades económicas.

“Debe haber pocos resultados en los que la Ciencia Económica sea tan unánime”, “es casi una tautología”, si “los precios suben es lo mismo que decir que cae el valor de los pesos” por lo que “si se emiten más pesos, cada uno de ellos comprará menos bienes y servicios”, son algunas frases que repite ante la carencia de argumentos causales. 

Al respecto, que los precios sean la expresión monetaria del valor de los bienes no implica de ningún modo que los precios de los bienes dependan de la cantidad de dinero emitido. Una mayor emisión de dinero podría estimular una mayor producción de bienes, o volcarse a incrementar los ahorros monetarios sin presionar sobre la demanda de bienes ni sobre su precio. El mismo Buscaglia lo admite al intentar explicar porqué la emisión monetaria de la Reserva Federal de Estados Unidos durante la reciente cuarentena no generó un alza de los precios. 

El fracasado programa de emisión cero de Macri y el FMI que terminó en un record histórico de inflación debería ser otra prueba en contra del terraplanismo monetarista del egresado de la UCA.

Luego señala a la “restricción externa” como una derivación de las teorías heterodoxas de la inflación, hecho que muestra una gran ignorancia no sólo sobre el pensamiento heterodoxo, sino también del ortodoxo. Las teorías monetaristas ortodoxas para economías abiertas señalan que un exceso de emisión monetaria puede derivar, no en una suba de los precios, sino en presiones sobre las reservas generando escasez de dólares (bajo esquemas de tipo de cambio fijo). Por otro lado, visiones heterodoxas donde la emisión genera inflación (por cuellos de botella) son compatibles con economías cuyo crecimiento se encuentra limitado por la escasez de divisas.

@AndresAsiain