La Cámara de Diputados de Santa Fe declaró ayer su “preocupación por las reiteradas violaciones a la prisión domiciliaria de Jorge Balla, en la ciudad de Santa Fe, cabecera del departamento La Capital”. Se trata del genocida condenado por delitos de lesa humanidad durante el último golpe militar, que amenazó y agredió a una pareja vecina, llegando a treparse por el tapial lindero. Pese a las presentaciones con pruebas sobre la violación reiterada de las condiciones de detención en su casa, el Tribunal Oral de Santa Fe no decide revocar ese beneficio.

“La provocativa actitud de Balla atenta contra el mandato de memoria, verdad y justicia que tan laboriosamente se viene construyendo desde hace 37 años, a partir del 10 de diciembre de 1983”, dice la declaración presentada por el diputado provincial Carlos del Frade, del Frente Social y Popular. “Este cuerpo remarca la necesidad de profundizar los juicios por estos delitos aberrantes como también insta a los organismos de la justicia federal a hacer cumplir las penas impuestas como mínimo requisito para hacer realidad la histórica consigna de Nunca Más”, sigue la declaración, que entre sus fundamentos recuerda: “Durante el año 2019, el Tribunal Oral de Santa Fe dictó cuatro cadenas perpetuas en el marco de la causa por la masacre de ltuzaingó y Las Hsras, producida en la ciudad, cabecera del departamento La Capital. Condenó a tres militares: el coronel Ramón Abel Recio, el sargento Jorge Alberto Balla y el cabo Luis Alfredo Gómez. Y a un ex oficial de inteligencia del 0-2 Osear Cayetano Valdez a prisión perpetua por los "homicidios calificados por alevosía" de cuatro militantes en resistencia a la dictadura: Jorge Piotti, su pareja lleana Gómez y los compañeros de ambos, Osvaldo Pascual Ziccardi y Carlos Mario Frigerio.

Justamente, es Balla quien hostiga desde junio de 2020 a una joven pareja vecina, Daiana y Juan. Él es hijo de un ex detenido político y el genocida llegó a gritarle “Montonero, hijo de puta, te voy a matar, te voy a agarrar por el patio”. El Foro contra Impunidad y por la Justicia de Santa Fe aportó pruebas, filmaciones y testimonios sobre las reiteradas violaciones a la prisión domiciliaria de Balla.

La declaración propuesta por Del Frade insiste, en sus fundamentos, en que el Foro denunció “que no se cumplieron las condiciones de detención que el propio tribunal fijó y que el tribunal desprecia todo lo que pasa". Por otro lado, la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y organismos de DDHH reclamaron el cede del beneficio de la prisión domiciliaria para Balla, quien fue condenado por, entre otros hechos, participar de la masacre de ltuzaingó y Las Heras ocurrido en 1977.

En declaraciones periodísticas, Guillermo Munné, secretario de derechos humanos de ADUL, ratificó que Baila "es un ex agente del Ejército que cumplió un rol activo en el terrorismo de Estado en la zona durante la última dictadura cívico militar". Al ser consultado sobre la situación que viven los denunciantes de Balla, el abogado de derechos humanos la calificó de "hostigamiento infernal, cotidiano. Es una pesadilla con episodios insoportables".