Quemo la postura. Al gesto vacío lo incendio, para que arda en el fuego y deje lugar al contacto real, más desprolijo, más desmelenado. Para que lo espontáneo y auténtico gane un poco la batalla ante tanta convención acartonada. Al cartón lo tiro al fuego que prende lindo. A la careta la quemo, al doble discurso, al triple. Al pequeño fascismo cotidiano, de señor que mira detrás de la ventana temiendo de todo, a la insistencia en ponerse chusma de barrio. Al interminable cuchicheo de cara alargada, de señalar lo de lxs otrxs. Chau, al fuego. A ver si, al darle mecha a esa fogata, nos volvemos más libres, más plenxs, y el mundo se vuelve un lugar mejor.

* Actriz, docente, directora y dramaturga. Actualmente presenta Este verano te mato, obra que escribió y dirige, los jueves, a las 21, en el Teatro Beckett. Guardia Vieja 3556.