El Frente de Todos propuso modificar el calendario electoral de este año ante la posibilidad que una segunda ola agrave la situación epidemiológica por la covid-19. En ese marco, el oficialismo busca un acuerdo con todas las fuerzas políticas para comenzar a evaluar la postergación de las Paso y la elección parlamentaria de medio término, para realizarlas en mejores condiciones climáticas (hacia comienzos de la primavera), mientras avanza el proceso de inmunización de la población con las vacunas. El cambio de la norma electoral debe ser resuelto por el Congreso. Pero el bloque de Juntos por el Cambio condicionó cualquier encuentro con el oficialismo - que por estas horas busca organizar el presidente de la Cámara baja, Sergio Massa- hasta después que la reunión de la mesa nacional de la coalición macrista que se realizará el próximo martes. (ver aparte)

La posibilidad de plantear un postergación electoral no era un secreto, formaba parte de la discusión política y la llegada de la “segunda ola” disparó la alarma. Esto es lo que le propuso el jefe de la bancada de diputados del Frente de Todos, Máximo Kirchner, a su par del bloque PRO, Cristian Ritondo, y otros representantes de Juntos por el Cambio que participaban este martes de un acto en Casa Rosada. Y que el ministro de Interior, Eduardo “Wado” De Pedro, concurra al Congreso eventualmente el martes próximo en busca de consensos con todos los bloques de la oposición.

La difusión de la propuesta y la especulación sobre que se había llegado a un acuerdo, desató el rechazo del ala dura del macrismo. “La opinión de cualquier provincia, por más importante que sea, no puede determinar un acuerdo para el resto”, sostuvo el diputado mendocino y presidente del Comité Nacional de la UCR, Alfredo Cornejo, para tomar distancia de la postura que podría haber adoptado Ritondo y otros representantes de la provincia de Buenos Aires que fueron a Casa de Gobierno. En un sentido similar se expresó la exdiputada y actual presidenta del PRO, Patricia Bullrich. 

Por su parte, en el ala mas dialoguista de Juntos por el Cambio no ocultan su malestar por “la forma que el oficialismo hizo pública la propuesta” y que obstaculiza el debate sobre el tema “en el que se venía “conversando”. “Se volvió diez casilleros para atrás, los halcones ya desplegaron sus alas”, sostuvieron sobre los propios ante la consulta de PáginaI12 de si el interbloque aceptaría el convite para discutir la postergación electoral.

De todas maneras condicionaron cualquier encuentro con el oficialismo hasta después que se reúna la mesa nacional de la coalición opositora el próximo martes. “Ya esta acordada desde hace tiempo”, dijeron sobre la reunión en la que los máximos dirigentes de JxC se volverán a sentar frente a frente. Hace un año que no se juntan de manera presencial.

Ahí tratarán de unificar posturas entre posiciones encontradas, para recién ver que propuesta lleva el ministro del Interior Eduardo "Wado" De Pedro a un futuro encuentro en el Congreso.

Las posiciones en JxC están divididas tanto fuera del Palacio legislativo como adentro. Incluso, la diputada radical Carla Carrizo (del sector de Evolución que se referencia en el senador porteño Martín Lousteau) presentó un proyecto propio sobre las Paso. La iniciativa de Carrizo es para ratificar las primarias ante la postura de algunos gobernadores peronistas de suspender las Paso ante la situación sanitaria, y que un sector del Frente de Todos no avaló.

Antecedente

Pero en su texto Carrizo propone achicar la distancia entre las primarias y las generales, para realizarlas “el segundo domingo de septiembre”. En sus fundamentos, la diputada radical sostiene que “debemos resaltar que la Cámara Nacional Electoral, mediante acordada 33/2020 del 16 de junio de 2020, puso en marcha un Programa para evaluar el posible impacto de la pandemia de COVID-19 en el proceso electoral del año 2021; con el objeto de evaluar, proponer y dar seguimiento a las medidas específicas a adoptar como consecuencia de la actual situación epidemiológica”. Algo que no está en los planes del ala dura del macrismo.

En tanto, desde el oficialismo insisten en que la decisión “se debe tomar con el amplio consenso de las distintas fuerzas políticas en el Parlamento”. Y que “de ninguna manera se forzaría” el corrimiento electoral sin ese acuerdo.