A diez días del cierre de la elección en la planta Amazon en Bessemer, Alabama, se supo que la mayoría de los trabajadores votó en contra de la sindicalización. Esta elección, pese a que podían participa menos de 6000 trabajadores, alcanzó relevancia internacional, sobre todo tras la mención del presidente Joe Biden sobre la importancia de la sindicalización y la crítica por los esfuerzos de Amazon por convencer a los trabajadores en contra de esta alternativa. 

"Más allá de que prevaleció el discurso antisindical de Amazon, hay un punto de inflexión en esta disputa: la participación de los demócratas y del presidente Biden en particular marcan un giro en la política del Estado Federal respecto de las corporaciones, las plataformas y de la posibilidad de la sindicalización de los trabajadores", explica el abogado laboralista Juan Manuel Ottaviano. 

"Incluso si esta elección no dio el resultado esperado, esa es la nota saliente. También está en cuestión si esas elecciones que se hacen en Estados Unidos son suficientemente democráticas dada la capacidad de las corporaciones para intervenir con prácticas antisindicales durante el proceso electoral. Eso en la Argentina está estrictamente prohibido", explicó el abogado, quien también es investigador del CETyD-Idaes de la Universidad Nacional de San Martín.

- ¿Todavía puede revertirse el resultado?

- Tanto Biden como el sindicato de "retail" venían adelantando que la elección podía ser anulada por el comportamiento de Amazon. El sindicato dijo que apelaría a las autoridades federales. Biden criticó en un discurso la conducta antisindical de Amazon. A esto se suma que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) destaca como uno de los fundamentos de un sistema democrático la alta tasa de sindicalización y recomendó especialmente que los Estados fomentaran la afiliación sindical de las empresas de plataformas. Hay un cambio interesante en ese sentido.

- ¿Un cambio de época?

- No sé si tanto, pero la subjetividad neoliberal está en debate en Estados Unidos. Evidentemente el gobierno demócrata decidió poner en tensión algunas de las premisas incuestionables del neoliberalismo más reciente, entre ellas las regulaciones laborales y tributarias para las grandes corporaciones, como Amazon, que están hipervaluadas a pesar de que no pagan impuestos federales ni siquiera en los Estados Unidos. El Partido Demócrata, para acercarse a la campaña sindical, introdujo la agenda de los salarios bajos de Amazon en el marco de una propuesta de aumento general del salario mínimo. además incorporó el debate por la discriminación racial dado que la mayoría de los trabajadores de Amazon son afroamericanos, en particular en ese almacén (Bessemer). Sin embargo, creo que hay que recuperar el pedido que inicialmente hacen los trabajadores de Amazon al sindicato que se refería sobre todo al hipercontrol de la jornada, de las tareas y horarios, y no tanto a los salarios.

- ¿Cómo que se analiza desde Argentina ese conflicto?

- Algunos empresarios festejan esto y me parece razonable. Pero saben que el sistema de relaciones laborales en Argentina es más dinámico, que los sindicatos y los empresario se pueden sentar a pensar más allá de un establecimiento en especial. Hay negociación colectiva en Argentina sin necesidad de que haya un sindicato en una planta en particular. No está en discusión la política de "sindicalismo cero" que defienden Amazon y Walmart. Una de las primeras propuestas de la bancada demócrata en la Cámara de Representantes fue aumentar las protecciones laborales. Ahora tiene que ser tratada por el Senado. Por más que algunos empresarios locales lean esta elección como una internacionalización de las políticas de "sindicalismo cero", yo veo exactamente lo contrario.

- En Europa se armaron sindicatos y las empresas no cerraron ni se fueron.

- La experiencia en Europa es muy distinta. Hay consenso sobre la promoción de la negociación colectiva y la organización sindical en plataformas en mayor consonancia con los organismo internacionales como la OIT. Hay experiencias concretas de comités de sindicatos, trabajadores y empresario para el acuerdo de buenas prácticas sindicales y empresarias que incluyen mejorías en las condiciones de trabajo. Y además hay experiencias concretas de reconocimiento de la relación laboral de colectivos de trabajadores que antes estaban contratados como independientes. Creo que Europa va camino a discutir la agenda de la privacidad y del respeto de los derechos laborales en el marco de la algoritmización de la gestión de la producción, de los servicios y del trabajo.

- Argentina podría ser atractiva entonces para estas empresas aún reconociendo los derechos laborales, no como afirman quienes aseguran que los sindicatos impiden las inversiones.

- Si la economía argentina, brasileña o mexicana no fueran interesantes, MercadoLibre no sería lo que es. Creo que sí, que están en condiciones de cubrir los costos laborales que exige la legislación. Son las plataformas las que tienen que probar que su sistema se apoya más en innovaciones tecnológicas que en la precariedad laboral o la evasión fiscal. Las innovaciones tecnológicas, en un marco de respeto por las regulaciones, implican un aumento de la productividad, mejores servicios pero también una sociedad mejor. Si no logran hacer eso, no hay un futuro deseable.