El financiamiento a las pequeñas y medianas empresas fue una de las prioridades del equipo económico durante la pandemia. El Banco Central publicó una encuesta sobre condiciones crediticias para el primer trimestre de 2021 que suma datos sobre este objetivo de alcanzar con crédito a tasas razonables a las empresas productivas. Se detalló que entre enero y marzo se percibió una mayor demanda de créditos Pymes impulsada por la baja de la tasa de interés. Esta fue una de las políticas prioritarias de la autoridad monetaria.

“En el primer trimestre de 2021 las entidades participantes de la encuesta informaron que diferenciando por tamaño de empresas, se observó un aumento de la demanda de crédito por parte de las Pymes sosteniendo el sesgo creciente de trimestres recientes. La demanda originada en las grandes empresas permaneció sin cambios de magnitud”, se indicó.

En el informe se detalló que “las seis entidades financieras que percibieron un incremento en la demanda de crédito lo identificaron a la disminución en la tasa de interés y a las mayores inversiones en activos fijos como los principales factores que explicaron este movimiento en el período”. El conjunto de entidades participantes de la encuesta espera un incremento de la demanda crediticia de las empresas para el segundo trimestre del año. La situación se reflejaría en las grandes empresas y se extendería “con mayor intensidad en las Pymes”.

Por el lado de los créditos a los hogares el informe de la autoridad monetaria indicó que “en el primer trimestre de 2021 el agregado de las entidades encuestadas manifestó una moderada flexibilización de los estándares crediticos asociados a créditos al consumo, neutralidad para los prendarios y para los hipotecarios (luego de presentar moderadas restricciones en los tres trimestres inmediatos anteriores) y una ligera restricción para las tarjetas de crédito”.

Se detalló que hubo comportamientos heterogéneos en relación con los términos y las condiciones de los préstamos a las familias. “Los spreads sobre el costo de fondeo se flexibilizaron en todas las líneas a las familias, con una mayor intensidad en otros créditos al consumo y en las tarjetas. Las comisiones se redujeron levemente para los créditos de consumo, se incrementaron moderadamente para las tarjetas de crédito y se mantuvieron sin cambios para las restantes líneas crediticias”, se planteó. 

Se agregó que los montos máximos de crédito se flexibilizaron para el segmento de otros créditos al consumo y en menor magnitud para los prendarios, permaneciendo sin cambios en los hipotecarios y en las tarjetas de crédito.