El presidente Alberto Fernández confirmó en Portugal lo que ya era una versión extendida: antes de fin de mes llegarán las primeras dosis de la vacuna de Oxford--AstraZeneca cuyo elemento activo se fabricó en la Argentina. Por supuesto que en el actual mundo de las vacunas nada es una ciencia exacta, pero el dato es que vendrían unas dos millones de dosis -como mínimo- en un mes. Y lo más trascendente es que se estaría destrabando el proyecto clave, el de mayor envergadura, diseñado por el gobierno argentino para conseguir vacunas. En sintonía con el mandatario argentino, el secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard, confirmó que recibieron desde Buenos Aires otros 5.7 millones de dosis del elemento activo y que habrá vacunas disponibles antes de fin de mes.
El presidente Alberto Fernández sugirió el viernes que habría novedades con las vacunas de Oxford-AstraZeneca: “Vendrán en los próximos días”. En la mañana de este lunes, en Portugal, ya fue específico: “Me dijo Andres Manuel López Obrador que antes de fin de mes empiezan a llegar las vacunas cuyo elemento activo se fabricó en la Argentina”.
Estas vacunas se sumarían a las previstas para el 21 de mayo, también de Oxford-AstraZeneca y que vienen por el programa Covax de la Organización Mundial de la Salud: 861.000 dosis.
Tres fuentes consultadas por este diario coincidieron en que, efectivamente, el laboratorio AstraZeneca, con sede en Cambridge, envió señales de que vendrán finalmente a la Argentina parte de las dosis fabricadas en mAbxience, en Garin, y que están sometidos a un control de calidad tanto en Cambridge, como en Estados Unidos y México. Al ser la primera partida fabricada en Argentina y terminada en México se sometió a tests por muestreo en los tres lugares: en los laboratorios centrales de AstraZéneca, en una planta de Estados Unidos y en México. Las fuentes afirman que todos los estudios estarán terminados el 20 y las partidas saldrían para Buenos Aires el 25.
Que Alberto Fernández lo haya dicho públicamente en Portugal parece terminar con la incertidumbre. Es que -según el presidente argentino- fue el propio mandatatrio mexicano el que le confirmó que habrá una partida todavía en mayo. Y eso abre las puertas a un flujo enorme, porque mAbxience envió a México más de 45 millones de dosis, de manera que debería haber suficientes para proveer a varios países que formaron parte de ese acuerdo: todos los de América Latina, salvo Brasil. El tweet de Erbrard, con el fondo del avión de Aeroméxico que llevó elementos activos desde Buenos Aires, confirma el flujo desde mAbxience hasta el laboratorio Liomont, donde se hace la terminación. Acompañó la publicación con un video del momento en que las dosis fueron descargadas de una avión de Aeroméxico.
Ebrard explicó que "el proceso de llenado y envasado final es complejo y tiene muchos requerimientos de calidad" y que se trata de "un logro importante de Liomont y la Comisión Federal para la Protección de Riesgos Sanitarios (Cofepris) haberlo resuelto satisfactoriamente". "La liberación de lotes, cerca de un millón cada uno, significa que tendremos abastecimiento de vacunas con mucha mayor certidumbre a partir de fines de mayo. Y que México contribuirá a incrementar la producción de vacuna AstraZeneca para América Latina y el Caribe", remarcó también el funcionario mexicano. Efectivamente, la enorme producción que se puso en marcha y que estaba frenada, tiene como destino a la totalidad de los países latinoamericanos.
El incumplimiento de AstraZeneca hasta el momento ha sido notorio. El laboratorio se comprometió a enviar las primeras dosis a fines de marzo, por lo que el atraso será de dos meses, un tiempo que en situación de pandemia se percibe como un siglo. En principio la complicación se produjo en México donde Liomont, encargado de descongelar, filtrar, formular, embotellar, fotografiar cada vial y hacer el control de calidad, sufrió la demora. Sucedió que el contrato con AstraZeneca obligaba a utilizar filtros completos (el filtro y las conexiones del recipiente anterior y el posterior) que sólo se fabrican en Estados Unidos y en el país del norte rigió la prohibición de exportar vacunas o cualquier material necesario para fabricarlas. Mientras tanto, la parte argentina, mAbxience, del empresario Hugo Sigman, seguía enviado recipientes de 15 litros, con el principio activo congelado, una vez por semana.
Las fuentes que consultó este diario, aún antes del anuncio presidencial, mencionan que la primera provisión, desde fines de mayo y hasta casi fines de junio, será de dos millones de dosis para la Argentina, aunque podrían ser más. Pero la noticia tiene un contenido aún más significativo: se estaría destrabando el proyecto más audaz y el de mayor envergadura del gobierno para conseguir vacunas. Porque la Casa Rosada y el Ministerio de Salud, primero con Ginés González García y ahora con Carla Vizzotti a la cabeza, acompañados por la asesora presidencial Cecilia Nicolini, jugaron cartas fuertes en dos frentes: el de la vacuna Sputnik V y el de la fabricación de Oxford/AstraZeneca. El primero resultó un enorme acierto y el segundo se demoró exageradamente. Sin embargo, la producción en Argentina y México de Oxford/AstraZeneca puede ser ahora la carta fundamental en una especie de segunda etapa, la de contar con un flujo mayor y más continuo, sin una mirada desesperada únicamente puesta en los aviones que llegan de Moscú. Se abre, además la posibilidad de que todos los mayores de 60 estén vacunados con las dos dosis antes de fin de junio, lo que significa tener protegida a la franja de la población en la que se produjeron más del 80 por ciento de las muertes por covid.