El ministro de Medio Ambiente de Brasil, Ricardo Salles, renunció este miércoles en medio de investigaciones en su contra por su presunta participación en la exportación ilegal de madera a Estados Unidos y Europa. "Presenté mi dimisión (al presidente Jair Bolsonaro), que fue aceptada", anunció a la prensa Salles, de 46 años. Según consigna el diario O Globo, el ministro de Ambiente, actualmente objeto de dos investigaciones en el Tribunal Supremo Federal, recibió presiones y alegó razones familiares para dejar el cargo.

La investigación

Según informa el matutino O Globo, Salles está en el centro de la Operación Akuanduba que investiga delitos contra la administración pública, especialmente facilitación de contrabanado, practicados por agentes públicos y empresarios del sector maderero. La operación fue iniciada en mayo y en ese momento, Salles fue objeto de órdenes de registro y confiscación. Actualmente, más de diez empleados del ministerio de Medio Ambiente y del Instituto Brasileño del Medio Ambiente y de los Recursos Naturales Renovables (Ibama) fueron destituidos, incluyendo al jefe de la agencia medioambiental, Eduardo Bim.

A principios de este mes, Cármen Lúcia, ministra del Tribunal Supremo, autorizó la apertura de una investigación para determinar si el ministro obstruyó las pesquisas sobre una trama de deforestación ilegal en la región, la Operación Handroanthus, considerada la mayor jamás realizada. Según la Policía Federal de Brasil, un informe financiero elaborado por el Consejo de Control de Actividades Financieras (Coaf), detectó operaciones sospechosas que implicaban al ahora exministro de Ambiente.

La despedida

Después de su dimisión, Salles, cercano al presidente brasileño, dio una breve declaración desde el Palacio de Planalto donde aseguró haber buscado “el equilibrio entre el desarrollo económico y el medio ambiente”. En 2019, el ministro asumió el cargo al frente de la cartera de medioambiente. "Adoptamos medidas alineadas con el proyecto escogido por Brasil en 2018 con la elección de Jair Bolsonaro en forma democrática, que cambió lo que la izquierda estaba haciendo en los últimos años" en materia de medioambiente, afirmó ante la prensa.

Salles seguía contando con el respaldo público de Bolsonaro, que apenas este martes felicitó al extitular de Ambiente. “No es fácil ocupar su ministerio. A veces, la herencia es sólo un montón de demandas”. Tras la apertura de la investigación contra Salles, Bolsonaro dijo que era un “ministro excepcional”, pero que tenía obstáculos para desarrollar su trabajo por culpa de sectores de la Fiscalía y los “chiítas ambientales”, el término que el presidente de Brasil usa para definir a las agencias estatales de control ambiental. El exministro además informó que será sustituido por Joaquim Alvaro Pereira Leite, de la Secretaría de la Amazonía y Servicios Ambientales del Ministerio de Medio Ambiente.

La exministra de Ambiente de Brasil, Marina Silva, saludó la dimisión de Salles a quien criticó por su gestión al frente de la cartera ambiental. "La salida de Ricardo Salles es una victoria para la sociedad, pero no deja de ser una victoria parcial, sabemos que fue el operador de la política nefasta y antiambiental de Bolsonaro", escribió Silva en Twitter.

 Bolsonaro y su ahora exministro Salles son ampliamente acusados por organizaciones indígenas, académicos y ambientalistas por haber favorecido el aumento de deforestación a través de la reducción de recursos de los organismos de control ambiental.