El polo argentino, considerado una potencia en el mundo, inició una nueva etapa con la asunción como presidente de la Asociación Argentina de Delfín Uranga. La máxima autoridad ocupa el cargo que dejó Eduardo Novillo Astrada, y la intención seguirá siendo popularizar la actividad en todo el país.

"Los proyectos que compartí con el presidente anterior son la visión de hacer el polo más grande, de que sea más popular, de que más gente lo juegue, de que más gente lo vea, también lo patrocine, y de que sea más seguro. Eso se está empezando a dar, la gestión anterior fue muy buena, y ahora me toca continuarla", le explica Uranga a Página/12, en el medio de a cancha principal de Palermo.

La Triple Corona (Abiertos de Tortugas, Hurlingham y Argentino) que se está desarrollando de manera unificada con los clubes organizadores por primera vez, es el principio un esquema ambicioso.

"Para popularizar la actividad primero hay que hacerla más accesible, democratizar el acceso al conocimiento. Para eso lanzamos una plataforma que se llama Polo University, que permite que mucha gente conozca más del deporte, lo aprenda. Y para los que le gusta verlo, que sepan de qué se trata, sino es muy difícil ver un deporte en el que uno no sabe lo que está pasando en la cancha", describe Uranga.

Y agrega: "También apostamos a nuevos formatos, en el que la gente que tenga dos o tres caballos pueda jugar. El problema era que había muchos jugadores con cero gol de handicap en el interior del país, entonces buscamos una solución con el menos uno y el menos dos, para que se pueda diferenciar el cero gol y tal vez inviten al que también no era tan bueno, y pase a ser un jugador demandado". 

Uranga, en el centro, durante la presentación de la Triple Corona. Imagen: Prensa AAP.

La Asociación lanzó para ello las ligas del interior, para que sean el principal potencial para que el polo verdaderamente sea federalista, y donde las instancias finales se jugarán en el campo de Palermo. 

"Darle acceso a Palermo -continúa Uranga- a gente que lo veía como algo inalcanzable es la idea. Hace poco fui a los clubes del sur, y me sorprendieron en lugares como Quilmes o La Plata como está funcionando el polo. Creo que es salir a ver qué necesitan esos clubes, y en función de eso llevar una propuesta que haga que el polo sea más grande".

--¿Cómo hacen para insertar a la persona que no tiene elementos para jugar?

--Estamos trabajando en varios aspectos, abriendo por ejemplo el polo que se pueda jugar en bicicleta, en una ruedita, inclusive a pie. En Polo University es muy buena la parte de oficios, y poder generar trabajo para esa gente que le gusta el caballo, y darle la chance de hacerlo en el exterior. La pandemia nos demostró que el petisero argentino es muy valorado en el mundo, y es muy necesario. Si ellos no podían viajar no se comenzaba la temporada en el mundo, entonces estamos exportando mano de obra calificada, que así fue como salieron las visas. Eso nos enorgullece, poder darle un título de petisero, uno de canchero, o de banderillero. Este año viajaron banderilleros a Francia, y luego con esa ganancia pudieron comprarse una propiedad en Argentina. De las cosas más lindas de ser presidente, es poder transformarle la vida a las personas, porque hay polo y también hay una industria. 

--¿Esos trabajadores del polo son personas de bajos recursos?

--Exacto. Los que lo ejercen son personas muy humildes, por eso es una linda oportunidad para que la gente se inserte, tenga un trabajo, y a partir de ahí poder viajar al exterior y conocer otras culturas. Por ejemplo, los que hacen los tacos de los caballos son artesanos, los que hacen las monturas, las botas, todo eso implica gente trabajando porque no lo puede hacer la tecnología. 

La meta de Uranga es "poder hacer un polo más grande, no sólo en Palermo sino también en Pilar, donde más gente tenga acceso a eso. Aspiro a algo más internacional también. Como la pandemia nos truncó un poco el proyecto, la intención es consolidar la Universidad del Polo para que se puedan entregar títulos a los que se reciben en cada rubro".

Para el directivo, la cosas tienen que ser pensadas en el largo plazo, y por eso estima que era necesario la continuidad: "Mi desafío es generar el próximo presidente. Lo ideal es que el elegido esté dentro del Consejo, para que las cosas que no te alcanzan con un mandato para lograrlas, puedan continuarse para que todo llegue a destino". 

La intención de la Asociación es que la gente se divierta, tanto adentro de la cancha como afuera, con las opciones recreativas y gastronómicas que se brindan en Palermo. El otro aspecto en el que harán hincapié es la seguridad. "Como es un deporte de riesgo, si tomamos conciencia, entre todos nos podemos cuidar", destaca.

En relación a los nuevos equipos en la competencia, el presidente señaló que "las novedades generan eso de no saber lo que va a pasar. Y es importante que se coronen en Palermo nuevas personas que hasta ahora no han ganado el Abierto. Se está dando un cambio generacional, y los chicos que ingresan son muy competitivos".