Si bien el Comité Olímpico Internacional comunicó que la tenista china Peng Shuai se encuentra bien y que participó de una videollamada con el presidente del organismo, el alemán Thomas Bach, en la que aclaró su situación, la WTA continúa con dudas sobre el contexto relacionado con la jugadora. De acuerdo con la entidad que rige el tenis femenino a nivel mundial, no hay certezas de que Peng se esté expresando con libertad y sin que esté siendo coercionada.

La exnúmero uno del mundo en dobles apareció en las últimas horas en una llamada con Bach, en la que aseguraba que se encontraba bien en su casa de Beijing y en la que pedía que se respetara su privacidad. Sin embargo, la WTA respondió que ese video "no alivia las preocupaciones por su bienestar y por su capacidad para comunicarse sin censura y coerciones".

"Este video no cambia nuestra petición de que se realice una investigación completa, justa y transparente sobre sus acusaciones de abuso sexual", amplió la WTA, lo que representa un enorme desafío a la autoridad del COI, que dio por sentada la veracidad de lo dicho por la tenista en la videollamada con Bach.

Peng se encontraba en paradero desconocido desde que el pasado 2 de diciembre acusara al ex viceprimer ministro chino Zhang Gaoli de abusar de ella sexualmente hace tres años. Solo los medios afines al Gobierno chino habían mostrado imágenes de la tenista desde aquella fecha, hasta esta llamada con el COI. 

Las dudas de la WTA van en paralelo a las de Yaqiu Wang, de Humans Right Watch, que considera que la conversación entre Bach y Peng se habría realizado bajo "coerción". "El COI está siendo cómplice de la maquinaria de propaganda y de un caso de coerción y de desaparición forzada por parte del Gobierno chino", publicó la activista en su cuenta de Twitter.

Un detalle no menor en el desenlace de esta historia tiene que ver con la gran relación que existe entre el Comité Olímpico y el Gobierno chino a partir de la organización de grandes acontecimientos. China fue anfitrión de los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 y repetirá la experiencia entre el 4 y el 20 de febrero de 2022 con los Juegos Olímpicos de Invierno, también en su ciudad capital como epicentro.

El caso Peng estalló a menos de tres meses de que comiencen los Juegos, a los que Estados Unidos "evalúa" boicotear a nivel diplomático por presuntos abusos de derechos humanos por parte del Gobierno chino. China considera que tales acusaciones no son más que una "campaña de difamación" y que "politizar el deporte va en contra del espíritu olímpico", recalcó este lunes el portavoz del Gobierno chino, Zhao Lijian,  a una pregunta sobre este posible boicot, al que, según el diario británico The Times, podrían también sumarse otros países como Reino Unido, Australia o Nueva Zelanda.

Para el Gobierno chino, la llamada entre Bach y la tenista es "suficiente" para despejar las dudas. "No es un asunto diplomático", destacaron desde el Ministerio de Asuntos Exteriores, mientras que el portavoz Zhao destacó que "se la ha visto recientemente" en respuesta a las preguntas de los periodistas.