El abogado cordobés Rodrigo de Loredo pasó al centro del escenario político al ser protagonista de la ruptura formal de Juntos por el Cambio en la Cámara de Diputados.

De Loredo  fue funcionario del gobierno de Mauricio Macri, pero su carrera política comenzó en Córdoba de la mano de su suegro, Oscar Aguad, ex ministro de Defensa bajo la presidencia macrista. 

Fue electo legislador provincial dos veces y en la última interna de JxC se impuso junto a Luis Juez al jefe de la bancada de macristas y aliados en la Cámara baja, Mario Negri. Presidirá un bloque propio de doce legisladores radicales que se oponen a la jefatura de Mario Negri.

Rodrigo de Loredo fue elegido por el senador Martín Lousteau para presidir el bloque  que rompió con el interbloque de JxC que se resiste a renovar las autoridades de la bancada. 

Nació en 1980 y cursó sus estudios primarios en la ciudad de Córdoba en el Colegio Santo Tomás y el secundario en el Instituto Nuestra Señora Monjas Azules. Allí se cruzó con quien le daría la mayoría de su caudal político para su carrera: Carolina Aguad. A los 17 años formó pareja con la hija de "El milico" Aguad, con quien tiene cuatro hijos.

De la mano de su suegro, De Loredo fue construyendo una carrera a la par que los radicales cimentaban su alianza con el Pro, que creció al amparo del blindaje mediático de cara a las presidenciales de 2015. 

Fue electo legislador provincial dos veces, aunque la segunda, ya durante la presidencia de Macri, renunció para asumir como titular de  Arsat, una vez que Aguad desembarcó en el Ministerio de Comunicaciones.

En la legislatura cordobesa intentó adoptar un estilo confrontativo con el peronismo, y algunas de sus intervenciones fueron acompañadas con perfomances como cortar una torta en el recinto para explicar el bono que la empresa eléctrica provincial, Epec, repartió entre sus trabajadores y funcionarios.

En su estrategia para ganar presencia mediática y en redes, saltó en paracaídas, rifó su auto y condujo un taxi en el que filmó la charla que mantenía con sus supuestos pasajeros.

Sin duda su mayor logro fue ganarle, junto con Luis Juez, la última interna al dirigente Mario Negri y al exministro de Turismo macrista, Gustavo Santos. Apoyados por Lousteau y la exministra de Seguridad y titular de Pro, Patricia Bullrich, asentaron su victoria en las generales del 14 de noviembre. 

Allí logró el voto del 54,04 por ciento de los cordobeses, derrotando al justicialismo del gobernador Juan Schiaretti por 25 puntos.