El Santo del Amor existe, pero no tiene nada que ver con San Valentín ni con su fecha de celebración. Aquellos que quieran conseguir una pareja deben rezarle a San Antonio de Padua, reconocido por encargarse de formar romances imposibles, y que se conmemora cada 13 de junio.

El Santo del Amor

El patrono de los amores imposibles, declarado santo en el año 1232, menos de un año después de su muerte, era un sacerdote franciscano de origen portugués y doctor de la Iglesia. Era hijo primogénito de una familia de buena posición económica y su nombre de nacimiento era Fernando de Bulhôes y Taveira de Azevedo.

A los 15 años ingresó al convento agustino de San Vicente de Fora, en Lisboa, Portugal. En 1220 tuvo su primer contacto con los frailes, religiosos fundados por Francisco de Asís en Italia y su nombre Antonio lo adoptó cuando se hizo franciscano.

En 13 de junio de 1231, cuando tenía 36 años, falleció y por orden del papa Gregorio IX, en lo que significó una de las canonizaciones más rápidas de la historia, se celebra su día para homenajearlo.

La tradición de las 13 monedas regaladas

Como parte de la tradición, aquellos que quieran pedirle un compañero a San Antonio deben obtener 13 monedas regaladas de personas cercanas, ofrendárselas y poner la figura de San Antonio de cabeza. De todas formas, se trata de una superstición y una práctica no cristiana.

Además, los interesados tendrán que asistir a una iglesia donde esté San Antonio y dejar como ofrenda 13 monedas, encender una veladora blanca y rezar 13 padres nuestros, 13 Ave Marías y 13 glorias. Esas oraciones deben repetirse durante 13 días consecutivos.

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