Mientras aguardan con expectativa la decisión de los accionistas de SanCor en la asamblea extraordinaria que se realizará hoy en Sunchales para definir su futuro, la provincia monitorea el destino de la planta de Centeno, una de las tres que la cooperativa pretende cerrar, o negociar su venta, en el marco del plan de reestructuración que votarán los asociados. La definición de la asamblea, para ratificar el plan de reestructuración, es crucial para el destino de la cooperativa que cuenta con cuatro mil trabajadores, 1.500 productores y más de 20 mil empleos indirectos. "La crisis de SanCor es la crisis de la lechería en Argentina, y de una macroeconomía nacional que no retribuye ni acumula por el lado cooperativo", dijo el ministro de la Producción provincial, Luis Contigiani.

Los asociados de SanCor fueron convocados hoy a las 8.30 a una asamblea extraordinaria que se realizará en la casa central de la cooperativa en Sunchales. Cerca de 1.500 tamberos decidirán, entre otros temas, la delegación en el Consejo de Administración de la cooperativa para que negocien las condiciones, contrataciones y cláusulas contractuales para implementar el Plan SanCor y el Fideicomiso Financiero de Administración.

El plan apunta a la reestructuración del gigante lácteo, con una importante reducción de puestos de trabajo -a partir de retiros voluntarios- y de salarios, deudas con proveedores, inyección de fondos financieros, venta de marcas, y el cierre de las plantas ubicadas en Centeno, Brikman y Coronel Moldes. "Por la situación delicada en la que está SanCor, si no hay un cambio brusco de escenario, van a una capitalización a mediano plazo. Mientras tanto, están tratando de resolver el problema financiero", explicó Contigiani.

Con la aprobación del Fideicomiso Financiero la cooperativa podrá recibir los 250 millones de pesos restantes de la asistencia acordada con el gobierno nacional por 450 millones. El préstamo se destrabó cuando Atilra, el gremio que nuclea a los trabajadores lácteos, acordó una rebaja sustancial de los aportes extras que recibían de las cámaras lácteas, que aprovecharon la grave situación de SanCor para intentar avanzar en un proceso de flexibilización laboral para todo el sector.

El titular de la cartera productiva denunció que la demora de 40 días en enviar la asistencia le hizo perder a SanCor, 300 millones de pesos en leche. "Fue una demora inexplicable, o explicable desde el punto de vista de los intereses en juego", dijo Contigiani, quien denunció la participación en las negociaciones de funcionarios nacionales, como el vicejefe de Gabinete, Gustavo Lopetegui, fundador de la láctea Pampa Cheese.

En el Ministerio de la Producción aguardan la resolución de la asamblea para avanzar con la reapertura de la planta de SanCor en Centeno. Si bien están firmes las negociaciones con la empresa La Tarantela, la provincia tiene acordado con los directivos la implementación de una cooperativa integrada por los 50 trabajadores.