Desde Santa Fe

El sábado, el secretario general del Partido Socialista en Santa Fe Enrique Estévez advirtió que "los vivos y especuladores que tienen un pie en cada barco", tarde o temprano, "se caerán al agua". Hablaba de sus colegas de la UCR, José Corral y Mario Barletta, quienes forman en el Frente Progresista en la provincia y en la alianza con el PRO, en la Nación. Cuarenta y ocho horas después, el que se cayó fue Barletta de la lista de candidatos a diputados nacionales de Cambiemos Santa Fe, empujado por los operadores de Mauricio Macri.

La lista se digitó en la Casa Rosada. Corral había propuesto a Barletta para encabezar la lista, pero el macrismo le puso bolilla negra y -en el tira y afloje‑, el jefe de la UCR aceptó que lo reemplace otro radical: el secretario de Políticas Universitarias y ex rector de la Universidad Nacional del Litoral, Albor Cantard. Lo que revela que la UNL ya forma parte del dispositivo político de Macri y Corral.

El número dos sería el diputado del PRO, Luciano Laspina (que heredó la banca del cómico Miguel Torres del Sel) y seguirían tres mujeres: Lucila Lehmann (del Espacio Carrió, que llevó como madrina de su casamiento a Lilita), Gisela Scaglia y Ana Copes del Partido Demócrata Progresista.

La grilla dejó sin chances a otros dos: el ex presidente del Partido Justicialista, Ricardo Spinozzi, que se pasó al PRO junto con su jefe, Carlos Reutemann, y quería renovar su mandato. Y el concejal radical Jorge Boasso, que completó la fórmula del PRO con Torres del Sel, en 2015, y amenazó con ir a la interna si Barletta encabezaba la lista, lo que no ocurrirá. 

Ayer, el diario Clarín informó que Barletta llevará al Congreso sus quejas por el operativo del PRO para digitar las listas de Cambiemos en Santa Fe y en otras provincias. Le pedirán al jefe del bloque radical, Mario Negri, lo que Ricardo Alfonsín puso en palabras: "No firmamos un contrato de vasallaje como para que el PRO decida qué lugares le da a la UCR y hasta qué nombres poner en las listas".