Mientras las consultoras anticipan para abril un índice de inflación que rondará el 5,5 por ciento, lo cual marca un descenso respecto del 6,7 de marzo, pero manteniéndose en un nivel muy elevado, en mayo habrá aumentos que mantendrán en escena la suba general de precios: alquileres, prepagas, colegios privados y GNC son algunos de los incrementos ya anticipados.

Las proyecciones de lo que ocurrió en abril se ubican entre 5 y 6 por ciento. Las consultoras LCG, Focus Market y Ecolatina estiman que el índice de precios se ubicó en 5,5 por ciento, mientras que Ferreres & Asociados proyecta 6 por ciento. A su vez, Analytica espera un 5,3 por ciento, mientras que Gabriel Rubinstein y Asociados midió 5,7, lo mismo que EcoGo. Otras consultoras, como C&T Asesores Económicos, estimaron un 4,8 por ciento, acercandose al IPC de febrero.

Paula Malinauskas, economista de LGC, comenta que "en el relevamiento que hacemos de 8000 productos de alimentos y bebidas, las últimas cuatro semanas promediaron una inflación del 5,1 por ciento mensual. Esto muestra una desaceleración de lo que fue la inflación de alimentos y bebidas de los últimos dos meses, que fue aproximadamente del 7 por ciento. Esta desaceleración se da en parte por las bases de comparación muy altas de los últimos meses y por la caída de los precios de los productos estacionales en las últimas semanas de abril". A raiz de estos datos, "la consultora ya corrigió su proyección de inflación anual al 70 por ciento para 2022".

El consultor Santiago Manoukian señala que "marzo dejó un arrastre importante para abril, mes que mostrará una inflación en la zona del 5,5 por ciento (con sesgo al alza), con alimentos trepando nuevamente por encima y una inflación núcleo que no da indicios de ceder. Si bien se prevé que la inflación del segundo trimestre se encuentre por debajo del primero, se mantendrá elevada, con riesgos de acelerarse. A la fuerte inercia se le suman las revisiones alcistas en las pautas acordadas en las paritarias, sumado al combustible extra que aportarán las subas de los servicios públicos, con su doble efecto en la dinámica de los precios y la mayor indexación del dólar mantendrán la inflación elevada. A esto se le suma el escaso poder de fuego de las medidas de control en este contexto, con una inflación en 2022 que se encamina a ser la mayor en los últimos 30 años"

Nuevos aumentos

Para mayo hay varios aumentos autorizados que impactarán en el índice de precios al consumidor del Indec, y que tendrá arrastre sobre el resto de los precios.

Tal es el caso de la medicina prepaga. El Ministerio de Salud autorizó el aumento de las cuotas de la medicina prepaga y los afiliados deberán abonar un 8 por ciento más a partir de mayo, un 10 por ciento desde junio y otro 4 por ciento en julio. Hasta abril, las cuotas habían aumentado un 22,5 por ciento en cuotas: 9 por ciento en enero, 12 por ciento (en dos partes de 6 por ciento) en marzo y otro 1 por ciento en abril. Así, el acumulado en julio alcanzaría el 51,3 por ciento. La medida alcanza a todas las entidades inscriptas en el Registro Nacional de Entidades de Medicina Prepaga (RNEMP).

En el caso de telefonía, cable e internet, el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) oficializó dos aumentos de 9,5 por ciento que impactarán en mayo y en julio, respectivamente. También se fijaron valores máximos que pueden cobrar las compañías de telefonía móvil. En este caso, los incrementos son especialmente para las cooperativas y pequeñas empresas que cumplen con la reglamentación oficial respecto de las tarifas, pero las tres compañías líderes en telefonía, como Telecom, Telefonica y Claro consiguieron amparos judiciales que los habilitan a aumentar muy por arriba de lo que autoriza el gobierno.

El GNC, en tanto, aumentará hasta 15,5 por ciento en mayo, lo cual implica entre 5 y 7 pesos por metro cúbico según cada provincia. Así, el valor del metro cúbico en la Ciudad alcanzará los 50 pesos y en el resto del país promediará los 67 pesos.

Respecto a los alquileres, la renovación de contratos será del 53,9 por ciento. No se quedan por fuera los colegios privados, que tendrán un ajuste en tres cuotas hasta alcanzar el 25 por ciento en septiembre, aunque este ajuste dependerá de cada jurisdicción. Los costos de matrícula también tendrán un aumento retroactivo del 8 por ciento a partir de la cuota de marzo, otro 8 por ciento a partir de julio y un 9 por ciento más a partir de septiembre.