Mientras continúa la ofensiva rusa en el este de Ucrania, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, firmó este sábado un proyecto de ley de 40.000 millones de dólares destinado a garantizar el suministro de armas y apoyo económico para el gobierno de Kiev, anunció la Casa Blanca.

Biden firmó el texto -aprobado antes por el Congreso- durante su visita a Corea del Sur, su primer viaje a Asia como presidente. La ayuda, que será canalizada en los próximos cinco meses, incluye un presupuesto de 6.000 millones de dólares para que Ucrania se equipe de vehículos blindados y defensa antiaérea.

Agradecimiento

En Twitter, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, agradeció a su homólogo estadounidense la ayuda. "El apoyo del poder ejecutivo (de Estados Unidos), del presidente Biden y del pueblo estadounidense a la lucha (de Ucrania) contra el agresor ruso es crucial", añadió, utilizando el ícono de las banderas en lugar de nombres de países. "Esperamos esta nueva e importante ayuda. Se necesita ahora más que nunca", añadió, en un tuit publicado en inglés y ucraniano.

El conflicto Rusia - Ucrania, minuto a minuto

Los países occidentales han suministrado armas y apoyo financiero a Ucrania para la guerra contra Rusia. El 13 de mayo, la Unión Europea (UE) anunció que daría una ayuda militar adicional de 500 millones de euros (unos 530 millones de dólares) a Ucrania en ayuda militar. Esto supone "un total de 2.000 millones de euros" (unos 2.100 millones de dólares) desde el inicio de la guerra, según el jefe de la diplomacia de la UE, Josep Borrell.

Sin embargo Zelenski volvió a pedir armas a la comunidad internacional este sábado. "Necesitamos blindados. No voy a decir qué blindados necesitamos concretamente. Seré franco: necesitamos de todo tipo", dijo en Kiev, en una rueda de prensa conjunta con el primer ministro portugués, António Costa.

El mandatario dijo espera que la segunda reunión virtual del grupo de contacto militar para Ucrania, que se celebrará el próximo lunes con la participación de los ministros de Defensa de más de 40 países, decida sobre la entrega al Ejército ucraniano de "sistemas de misiles estadounidenses MLRS". El M270 MLRS es un lancohetes múltiple autopropulsado y blindado, cuyos proyectiles, dependiendo del tipo, puede tener un alcance de hasta 300 kilómetros. Según Zelenski, este tipo de armamento es clave para expulsar a las tropas rusas del territorio de Ucrania.

De ahí que una de las tareas que se ha impuesto Rusia sea interceptar en territorio ucraniano los envíos de equipo militar occidental que llegan a través de Polonia. Este sábado, el Ministerio de Defensa de Rusia anunció este sábado que destruyó con misiles de crucero "Kalibr" una importante partida de armamento occidental destinado a las fuerzas ucranianas que combaten en el este de Ucrania, en la zona conocida como Donbás. Según el portavoz castrense ruso, Ígor Konashénkov, el cargamento militar, procedente de Estado Unidos y países europeos, fue interceptado y destruido junto a la estación ferroviaria de Malín, unos 100 kilómetros al noroeste de Kiev.

Entrada prohibida

Poco después de que Washington informase de la promulgación del paquete de ayuda, Rusia prohibió la entrada a su país a Biden y a otros 962 ciudadanos estadounidenses en respuesta a la sanciones de EEUU Moscú por la llamada "operación militar especial" en Ucrania. Biden figura en la lista, ordenada alfabéticamente en ruso, con el número 31, seguido de su hijo Hunter. Entre los altos cargos estadounidenses sancionados se encuentran, entre otros, el secretario de Estado, Antony Blinken, el titular de Defensa, Lloy Austin, y el director de la CIA, William Burns. También se le prohibió la entrada en país al actor Morgan Freeman, quien en 2017 grabó un vídeo en el que acusó a Rusia de complotar contra Estados Unidos. 

La batalla de Lugansk

Mientras tanto, tras clamar victoria en Mariúpol, en el sur de la región de Donetsk, Rusia prosiguió  su ofensiva para hacerse con el control de la totalidad de la región Lugansk, en el este Ucrania, donde avanza palmo a palmo pese a la encarnizada resistencia ucraniana. "El duro sino de la región de Lugansk es no dar a los rusos seguir avanzando", escribió en Telegram el jefe de la administración regional ucraniana, Serguéi Gaidái, quien informó que se libra combates en las afueras de Severodoneks.

Añadió que esa ciudad esta siendo destruida por las fuerzas rusas de la misma manera que lo fue Mariúpol, donde este viernes se rindieron tras varias semanas de asedio los últimos combatientes ucranianos atrincherados en la acería Azovstal. Severodonetsk es una las pocas localidades de la región de Lugansk que permanecen bajo el control de las tropas ucranianas. "Para este momento cerca del 10 por ciento de la región de Lugansk se encuentra bajo en control de Ucrania. No se puede decir dónde la situación es más complicada, porque todo el territorio de la región está bajo fuego. Todo, sin excepción", declaró Gaidái.

El foco de las acciones de combate se encuentra en el norte de la región de Lugansk, en la línea entre las ciudades de Séverdonetsk y Lisihansk, que según los expertos militares es la puerta para acceder al norte de la región de Donetsk. En caso de que las tropas rusas rompieran las defensa ucranianas en ese sector podrían intentar cercar a la importante agrupación militar que Ucrania mantiene en Kramatorsk, su principal bastión en la vecina región.

Sin embargo, Gaidai desestimó las declaraciones que hizo este viernes el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, acerca de que la "liberación de república popular de Lugansk concluirá próximamente", y aseguró que Rusia teme una contraofensiva ucraniana una vez que el Ejército de Ucrania reciba la cantidad suficiente de armamento occidental.