Miembros de la Policía de Salta presentaron dos denuncias en contra del fiscal general federal Francisco Snopek, por amenazas y privación ilegítima de la libertad. La existencia de las denuncias formales fue confirmada ayer por el Ministerio Público Fiscal de Salta, que indicó el inicio de una investigación a raíz de estas presentaciones y también "por los presuntos episodios eventualmente contemplados por el régimen protectorio contra la violencia familiar y de género". 

El hecho por el que se investiga ahora al fiscal federal, comenzó cerca de la medianoche del domingo 22 de mayo y concluyó en los primeros minutos del lunes 23. 

Aunque la información oficial no dio detalles sobre el caso, Salta/12 pudo confirmar que los hechos sucedieron de esta manera: el domingo a la noche dos hombres y una mujer policía concurrieron a un domicilio en la zona oeste de la ciudad de Salta, en respuesta a un llamado al Sistema de Emergencias 911. Allí, una mujer que estaba con un bebé en brazos contó que su pareja la había empujado contra la pared y le provocó una lesión en el brazo derecho, además de golpes en la cabeza. La mujer también dijo que ya hubo otros hechos de violencia de parte del fiscal. 

Los dos policías varones y la mujer policía, afirmaron que en esas circunstancias el fiscal los amenazó y cerró la puerta de ingreso a la casa, con lo que les impidió la salida. Ante esta situación llegó un comisario, que habló con el fiscal y con su esposa, y la mujer dijo que no iba a hacer la denuncia y se negó a recibir atención médica. Y como su marido no quería retirarse, ella se fue de la casa en compañía de su madre y su hijito, de 4 meses de edad. 

Si bien el MPF no identificó el nombre del funcionario judicial, ya es público que se trata de Snopek. De hecho, el organismo provincial dio la información oficial recién tras la "difusión masiva de diversa información vinculada a los hechos". Evidentemente, se trata de un caso altamente sensible para los actores involucrados, el mismo MPF salteño aclaró que dio a conocer esta comunicación "en el marco de las potestades consagradas en el Código Procesal Penal, priorizando el límite impuesto por el interés, seguridad y respeto de las posibles víctimas, entre otras limitaciones vinculadas al orden procesal y jurídico".

El MPF de Salta también aclaró que si bien en un primer momento intervino la Fiscalía Penal N° 1, a cargo de Daniel Gálvez, las denuncias fueron finalmente remitidas y concentradas en la Fiscalía Penal 2 de Violencia Familiar y de Género, a cargo de Luján Sodero, quien el pasado 24 de mayo convocó a la esposa del fiscal y "mantuvo una extensa entrevista" con ella.

Se indicó que aunque la mujer reiteró en esa instancia su decisión de no realizar una denuncia formal contra su pareja, se le brindó contención, asistencia y asesoramiento sobre distintos aspectos relacionados a la violencia de género y las medidas de protección. Por otra parte, un equipo interdisciplinario hizo un informe de riesgo, que ya fue entregado a la fiscala, y está incorporado a las actuaciones.

El MPF destacó que además de estas medidas, "la fiscal interviniente analiza igualmente avanzar en las actuaciones, por advertirse delitos de acción pública y por la violencia de género como una cuestión de interés público", es decir que no es necesario que la persona víctima de esos hechos haga la denuncia.

Las dos denuncias se hicieron el lunes 23 de mayo. Por un lado, dos varones y una mujer efectivos de la Policía provincial acusaron al fiscal por amenazas y privación de la libertad. El MPF de Salta indicó que cuando los policías llegaron al domicilio de la zona oeste de la ciudad de Salta el fiscal dijo que su esposa lo había violentado, que le había arrojado objetos y por eso llamó a la policía. Pero la mujer dijo otra versión: aseguró que su marido la había empujado luego de decirle que bajara a la planta baja de la vivienda a limpiar un líquido. 

Como la mujer se negó a denunciar a su pareja, los policías labraron un acta de declaración. Entonces el fiscal federal los empujó, los amenazó y cerró la puerta de ingreso. La segunda denuncia fue realizada por un cuarto policía, también por amenazas en contra del fiscal general. 

Por otro lado, el Ministerio Público Fiscal de Salta aclaró que "en ninguna circunstancia se dispuso o impartieron instrucciones por parte de ningún funcionario del Ministerio Público relacionadas a dejar sin efecto actuaciones o su desestimación; disponiéndose las medias oportunas ante el caso acontecido, y sin perjuicio de las que se continuarán ejecutando". 

Sin embargo, trascendió que los policías informaron al fiscal provincial Gálvez que el fiscal federal había cerrado el portón de acceso a la vivienda y los estaba reteniendo contra su voluntad.