La cantante Britney Spears fue invitada por dos integrantes del Congreso de los Estados Unidos para contar el caso de su tutela legal a manos de su padre, James Spears, que finalizó a fines de noviembre pasado.
La intérprete de "Womanizer" dio la noticia al compartir en Instagram la imagen de la carta firmada por los legisladores Charlie Crist y Eric Swalwell, que fue enviada el 01 de diciembre del año pasado.
En dicho texto, los dos miembros del Congreso la felicitaron a ella y a su abogado, Matthew Rosengart (el primero que pudo elegir por decisión propia), por la "histórica victoria" en la Corte de Justicia de Los Ángeles (California).
"Queríamos invitarla personalmente a usted y a su abogado a reunirse con nosotros en el Congreso en un momento mutuamente conveniente para describir con sus propias palabras cómo lograron la justicia", escribieron Crist y Swalwell.
"No hay duda de que tu historia empoderará a muchos otros además de los millones que ya están inspirados por ti y tu arte", señalaron.
Asimismo, los congresistas agregaron que la estrella musical "no tenía obligación de hacer nada más que luchar por sí misma", pero si estaba interesada, los legisladores querían aprender más "sobre la confusión emocional y financiera que enfrentó dentro del sistema de tutela".
En la publicación, la artista de 40 años escribió que se sintió "muy halagada" por la invitación, pero que en ese entonces no estaba preparada para contar su historia, debido a que el fallo había sido muy reciente.
"Estoy agradecida de que mi historia haya sido reconocida (por el Capitolio). A través de esta carta, me sentí escuchada y como si importara, por primera vez en mi vida. En un mundo, en el que tu propia familia estuvo en tu contra, la realidad es que es muy difícil encontrar personas que lo entiendan y muestren empatía", explicó.
Y agregó: "Nuevamente, reitero: no estoy aquí para ser una víctima, aunque soy la primera en admitir que estoy bastante mal por todo esto. No obstante, quiero ayudar a otros en situaciones vulnerables y ser valiente."
En este sentido, Spears reflexionó que tuvo "la suerte de tener un círculo chico de buenos amigos" con los que pudo contar.
La ganadora del GRAMMY, con más de 150 millones de álbumes vendidos en todo el mundo, fue liberada de la tutela legal que controló su vida durante 13 años a fines de noviembre del año pasado.
Desde el 2007, Britney estuvo a cargo de su padre, quien manejó no solamente sus finanzas, acuerdos y salud, sino también todo lo relacionado a su vida personal e íntima, que le impedía realizar actividades comunes como comprarse un auto o recibir visitas.
