La periodista y conductora de La García, Cynhia García, coincidió este lunes con el diagnóstico del ministro bonaerense Andrés "Cuervo" Larroque. Aseguró que, según su entender, existió un "silencio ensordecedor" por parte del Alberto Fernández tras el ataque con piedras al despacho de Cristina Kirchner.

Además, comparó este silencio con el retuit que hizo el mandatario al un periodista tras la aprobación en Diputados del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. Allí decía que, si Néstor Kirchner estuviese vivo, votaría a favor del entendimiento.

"No me vengan con que la mandó un mensaje de WhatsApp a Cristina después del ataque. ¿Dónde está la madurez política? Por un lado, hacemos un retuit y lo hacemos público, pero por otro retaceamos la solidaridad que tiene que ser necesariamente pública", planteó la periodista y conductora de AM750.

Del diagnóstico a la acción, el editorial de Cynthia García

¿Para qué un Gobierno de representación popular emerge en un proyecto de unidad? Para que no haya personas que tengan que vender sus cosas para comprar comida. Para bajar la pobreza, reconstruir el deterioro del poder adquisitivo. Para que haya un estado presente.

En este momento la situación está en líneas generales muy mal. Cuando escucho los signos de la reactivación económica, que son ciertos, me pregunto dónde están. Por qué no le llega a la gente. Ese crecimiento no le llegó a la gente.

Estoy diciendo la porción de la sociedad que es la clase trabajadora. No llegó el crecimiento. Si nosotros tenemos oyentes que nos dicen que tuvieron que vender el microondas para comparar comida es que algo no está funcionando.

Y hay que hacerse cargo de ese no funcionar. No se trata de decir lo que nos parece mal o bien. De pontificarse frente a un micrófono. No es una opinión cada postura frente al micrófono. Es un intento de construcción.

Así como el Gobierno del Frente de Todos no puede ser un Gobierno de diagnóstico. Tiene que ser de acción. 

Acuerdo, fractura y reconstrucción

El saldo del acerado en el Parlamento con el Fondo Monetario Internacional (FMI) cristalizó estos tajos irresolubles sobre la unidad de la coalición oficial. Hay una fractura. No sólo hacia adentro del Frente de Todos. Hay una fractura entre la representación política y la sociedad.

Y es una fractura cada vez más fuerte. Bastaba dar una vuelta por Twitter el fin de semana, como quien se pase por la plaza del pueblo, para percatarse de que está todo roto. ¿Cómo se reconstruye? ¿Quién recoge los pedazos? Cada cual tiene que poner la parte que le toca. 

En ese escenario me parece inconcebible que un Jefe de Estado retuitee a periodistas que no van en línea de la reconstrucción política. Alberto Fernández replicó un mensaje de periodistas que decían lo que haría Néstor. Diciendo que si estuviese vivo, votaría a favor del acuerdo.

Una sobreinterpretación de lo que haría si estuviese vivo. Básicamente es contrafáctico. En esa construcción hay una provocación hacia Máximo y Cristina. Le van a enseñar lo que hubiera hecho Néstor. ¿Dónde está la seriedad política de esa acción?

Es el Presidente el que está retuiteando. O, por ejemplo, un ministro Nacional, contestándole a un ministro provincial, Aníbal Fernández contestándole al Cuervo Larroque, porque dijo que resultaba ensordecedor el silencio de funcionarios sobre la agresión que sufrió Cristina.

Yo estoy de acuerdo con ese planteo. Hubo un silencio muy ensordecedor. No me vengan con que la mandó un mensaje de WhatsApp. ¿Dónde está la madurez política?

Por un lado, hacemos un retuit y lo hacemos público, pero por otro retaceamos la solidaridad que tiene que ser necesariamente pública.