Amanece que no es poco.

Los pibes van llegando en grupos dispersos a la Escuela República de Méjico (con jota, sí). Una bella y enorme escuela de barrio Sarmiento de Rosario. Una construcción de media manzana de extensión con un patio enorme, un mástil en el centro del terreno, a su derecha, el aula de carpintería, a la izquierda, la casa del fatídico director de la escuela y más allá, la sala de música y las aulas desplegadas en dos alas.

Los pibes, mientras se despiertan, se van congregando en grupos afines. Es una mañana nublada de invierno. Hace frío. Las maestras aparecen en escena, radiantes, enérgicas y maternales. Convocan con gritos suaves a la pléyade, a sus queridos. Y los pibes, entre los que me encuentro sorteando el séptimo grado, hacemos casos. Hay que formar fila. Cada grado ocupa el espacio imaginario asignado en el patio escolar.

La escuela fue terminada durante el primer gobierno de Perón, en 1951. No voy a ir bucear en las fuentes para que me confirmen la belleza de la obra arquitectónica de la que fui testigo. No quiero que Wikipedia me diga lo que sé: yo fue feliz en la 141 (¿Lo habré jugado a ese número en la quiniela clandestina alguna vez?)

Salir de la casa natal con el guardapolvo blanco y portafolio negro, tomar la calle Valentín Gómez, doblar por Gurruchaga, atravesar nombres patrios, Zelaya, Darragueira, llegar a Warnes, doblar y entrar.

Me aprendo la letra de memoria:

“Quiero llevarte como cuando era otro
y te lucía flamante sobre el guardapolvo
todavía no había crecido
y estabas prendida a mi solapa blanca
como un papelito…”

Ese día de algún año, los pibes cantamos una canción de cuna en el patio central mientras Carmencita –la mejor de la clase- iza la bandera a metros del ombú más hermoso del mundo.

 

La patria es la infancia, dicen que dijo Rilke y también todos los pibes que cantamos, a coro, “Dormite Patria”.

* Este texto está incluido en el libro Adrián Abonizio en tierra firme (Verde Llanura Ediciones) que su compilador, Paul Citraro, presenta mañana viernes a las 19 en el Feria del Libro de Rosario)