El secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla Corti, repudió este viernes el accionar de los efectivos de la policía bonaerense tras la suspensión anoche del partido entre Gimnasia y Boca Juniors que se iba a disputar en la ciudad de La Plata, al señalar que "nada justifica una represión con tanto ensañamiento y descontrol" al público presente. Un hincha del club platense murió a causa de la represión de la fuerza de seguridad.

"El accionar de la policía en el partido entre Gimnasia y Boca merece el total repudio. Nada justifica una represión con tanto ensañamiento y descontrol", sostuvo Pietragalla Corti a través de su cuenta de Twitter.

En ese sentido, el funcionario destacó que el Gobierno de la provincia de Buenos Aires "ya separó al jefe del operativo (policial) y está comprometida a sumariar y separar a cada uno de los responsables".

El secretario de Derechos Humanos expresó además su "solidaridad con la familia de la persona fallecida; con el camarógrafo que recibió un disparo de posta de goma en la cara y con cada hincha que fue a ver un partido de fútbol y terminó en el medio de ese desastre".

"Vemos con mucha preocupación la violencia institucional que ejerce la policía en los partidos de fútbol", advirtió, al tiempo que anticipó que desde la Secretaria de Derechos Humanos de la Nación @SDHArgentina van a "convocar a las áreas de DDHH de los clubes para generar herramientas que protejan a las personas que van a las canchas del país".

La postura del gobierno bonaerense

El Gobierno bonaerense que encabeza Axel Kicillof reconoció hoy que el operativo realizado anoche durante el partido que iban a disputar Boca y Gimnasia y Esgrima de La Plata "no fue capaz de brindar seguridad a quienes asistieron" y dispuso el apartamiento del jefe policial que estuvo a cargo.

"El Gobernador instruyó al ministro de Seguridad (Sergio Berni) para que el Jefe del Operativo sea inmediatamente apartado y para que se pongan todos los elementos a disposición del fiscal que está interviniendo. Vamos a respetar el accionar de la Justicia para que se determinen las responsabilidades de los hechos ocurridos y seremos estrictos con las sanciones de quienes no hayan cumplido su deber", señaló un comunicado difundido esta mañana.

Un hincha de Gimnasia y Esgrima de 57 años fallecido y más de un centenar de heridos fue el resultado de la represión de la Policía al público tripero que pugnaba por ingresar al estadio Carmelo Zerillo con sus entradas en la mano cuando ya se habían cerrado las puertas de acceso para presenciar el encuentro ante Boca Juniors, suspendido por "falta de garantías" por el árbitro Hernán Mastrángelo.