Desde Santa Fe

La última, fue la peor semana de Débora Cotichini, la directora de Inteligencia Criminal Zona Sur del Organismo de Investigaciones (OI) del MPA que participó en las investigaciones más relevantes contra el crimen organizado en Rosario. El martes 29 la imputaron en una causa penal que operó su propio jefe, el subdirector del OI Víctor Moloeznick. Y ayer, siete días después, fue destituida de su cargo por un tribunal disciplinario que integró el jefe de ambos, Jorge Baclini, fiscal general de la provincia. Una sanción que concluye un “proceso amañado” y “lleno de trampas”, según denunció su abogado defensor y ex ministro de Justicia Juan Lewis, quien -antes del veredicto- recusó con causa a tres integrantes del tribunal por falta de parcialidad: a Baclini, a la diputada socialista Lionella Cattalini y al senador Armando Traferri, pero el único que se excusó fue Traferri, reemplazado luego por el senador Alcides Calvo. Lewis dijo que apelará la resolución ante la Cámara en lo Contencioso Administrativo, y si no la revoca, ante la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe.

Cotichini ya estaba suspendida en sus funciones desde setiembre de 2021 y ayer el tribunal -en una decisión unánime- la destituyó del cargo y la inhabilitó para ocupar otro puesto en el MPA por diez años. Le aplicaron la máxima sanción con los votos de sus dos recusados: Baclini y Cattalini.

Incluso, en la audiencia de ayer, Lewis volvió a recusar con causa a Cattalini porque el martes 29, ofreció una conferencia de prensa en las puertas de la Fiscalía Regional de Santa Fe, donde se realizaban las imputativas a Cotichini, al ex ministro de Seguridad Marcelo Sain y otros investigados y gran cantidad de personas convocadas por los organismos humanos se manifestaban en la primera marcha contra el lawfare en la provincia. Cattalini y su colega Gisel Mahmud se acercaron hasta la esquina para hablar con periodistas en una actitud que los manifestantes interpretaron como una provocación política.

“Volvimos a recusar a Cattalini con causa y el resto del tribunal no lo aceptó. Con lo cual, quedó claro cuál era su posición. Cualquiera que haya escuchado las cosas que dijo Cattalini el día de las imputaciones penales se da cuenta que esa legisladora no puede tener imparcialidad. Hubiera sido fácil reemplazarla y hacer las cosas bien. Pero no lo hicieron, parece que la indicación era:  “Siga, siga”.

Lewis dijo que a Cotichini la removieron del Organismo de Investigaciones en un proceso “completamente amañado”, con "un montón de trampas" y con un tribunal que no fue imparcial. Y explicó qué recusó a Traferri, a la diputada Cattalini y a Baclini porque están “involucrados en la causa”. El único que se apartó fue Traferri. “Lo de Baclini es increíble: fue quien determinó la medida cautelar que suspendió el trabajo de Cotichini”. Tiene una opinión formada sobre el caso. “Y Cattalini habló por todos lados sobre la causa dando por sentada la culpabilidad de Cotichini”, incluso hasta el mismo martes 29 en las puertas de la Fiscalía donde la imputaron. 

Lewis dijo que la destitución a Cotichini estaba cantada y adelantó que cuando conozca los fundamentos en los próximos días, apelará ante Cámara Contencioso Administrativo de Santa Fe y eventualmente ante la Corte Suprema. “Se enjuicio” y destituyó a “una personas que participó de las investigaciones más relevantes del delito organizado en la provincia”, remarcó.

El tribunal que sancionó a Cotichini estuvo integrado –además de Baclini y Cattalini- por el fiscal regional de Venado Tuerto Matías Merlo, la abogada de Rafaela, Gabriela Caponi Fiorillo y el senador Alcides Calvo.