El Partido Demócrata de Estados Unidos aumentó este martes su mayoría en el Senado del país con la victoria de su candidato en el estado de Georgia, que se impuso por un margen estrecho al candidato del Partido Republicano.

El senador Raphael Warnock ganó contra un protegido de Donald Trump, el republicano Herschel Walker, un resultado que fortalece al presidente Joe Biden luego de que se previera una dura derrota en las elecciones de medio mandato. La victoria otorga al Partido Demócrata una estrecha mayoría en la cámara alta del Congreso con 51 contra 49.

"Esta noche los votantes de Georgia defendieron la democracia, rechazaron el ultra MAGAismo (corriente extremista del trumpismo) y, lo más importante: enviaron de vuelta al Senado a un buen hombre", publicó Biden en Twitter junto con un video de la conversación telefónica con el flamante senador. “Felicidades, Senador. Ahora vamos a hacer que jures de nuevo”, agregó.

La jornada transcurrió con total normalidad, después de que más de 1,8 millones de personas, una cantidad sin precedentes, sobre un padrón de alrededor de siete millones, hubiera votado de manera anticipada. Los votantes de Georgia acudieron este martes a las urnas para decidir si mantenían en el Senado a Warnock, un pastor, o le daban el escaño a Walker, exestrella del fútbol americano.

La segunda vuelta en ese estado del sureste de Estados Unidos, que se celebra porque ninguno de los dos alcanzó más del 50 por ciento de los votos en la primera, cerró las legislativas de medio mandato, en la que Warnock superó a Walker por 37.000 votos sobre un total de casi cuatro millones.

Luego de abrir a las siete de la mañana de este martes, los colegios electorales cerraron a las siete de la tarde dando por ganador a Warnock con 51,4 por ciento mientras que Walker obtuvo el 48,6 por ciento. Esta victoria no cambia el equilibrio de poder en el Congreso estadounidense puesto que los demócratas ya tenían el control del Senado, mientras que los republicanos dominarán la Cámara de Representantes baja.

Sin embargo, este nuevo escaño le da mayor libertad al partido de Biden, que gobernó los últimos dos años con una mayoría exigua de cincuenta escaños sobre cien. También le permitirá ejercer mayor influencia en los comités parlamentarios clave y limitará significativamente la influencia de un senador demócrata moderado como Joe Manchin, que ha enterrado varios proyectos importantes de la administración Biden.

La sorpresa en Georgia

Los republicanos veían en este escaño del Senado la oportunidad de acentuar su poder para bloquear las políticas del gobernante demócrata. A setecientos días de las próximas elecciones presidenciales, la oposición también esperaba poner obstáculos en el camino de Biden, a quien finalmente le fue mucho mejor de lo esperado en las legislativas de noviembre pasado.

La campaña demócrata en ese estado contó con la implicación del expresidente demócrata Barack Obama (2009-2017), que acudió allí en octubre y el pasado jueves dijo a los votantes que si hace dos años se hubieran quedado en casa, el poder de la Cámara Alta hubiera estado ahora en manos de los republicanos. “Una vez más, los georgianos han demostrado que cuando llega el momento de votar, se presentan y votan por un líder que luchará por ellos. Felicidades, Raphael Warnock” tuiteó el expresidente después de los resultados.

La derrota del candidato de Donald Trump es una nueva muestra de que la ola republicana que prometió el expresidente no se materializó. Con todo, el republicano anunció su candidatura a las presidenciales de 2024 pese a estar envuelto en varios escándalos y problemas legales.

Aunque suele ser un bastión republicano, Georgia sorprendió eligiendo a Joe Biden sobre Donald Trump en las elecciones presidenciales de 2020. Y dos meses después eligió a dos demócratas para el Senado. Este estado fronterizo con Florida volvió a ser objeto de deseo. Esta vez destacó el perfil atípico de los candidatos.

Con varios récords deportivos en su haber, el republicano Herschel Walker, considerado uno de los mejores jugadores en la historia del fútbol americano universitario, entró en política con 60 años. En la otra esquina estaba el ahora senador electo Raphael Warnock, quien antes de ser senador era pastor en la iglesia bautista de Atlanta donde predicaba el líder afro estadounidense de los derechos civiles, Martin Luther King.