En Chaco, cinco personas murieron de madrugada luego de robar un avión en Villa Ángela y estrellarse a poco de despegar desde un aeroclub local. 

El accidente se produjo pasadas las 2 de la mañana a cinco kilómetros del casco urbano, luego de que los hombres sustrajeran del hangar del aeroclub local un avión Cessna 206.

Todo comenzó cuando un peón de un campo ubicado a 7 kilómetros del aeroclub llamó al 911 para alertar que había "un avión volando muy bajo" por la zona y que se había precipitado sobre un campo despoblado.

Fuentes de la investigación informaron que las cinco personas que viajaban en el avión fallecieron a causa del impacto y que solo uno de ellos pudo ser identificado, ya que los demás cuerpos fueron hallados carbonizados.

Entre los restos del avión se encontraron una pistola calibre 9 miímetros, un teléfono satelital, billetes de moneda paraguaya y una gorra del club Cerro Porteño, lo que llevó a los investigadores a presumir que los fallecidos eran de nacionalidad paraguaya.

La aeronave, que tenía un valor cercano al millón de dólares, se encontraba en condiciones "óptimas" para el vuelo y pertenecía al empresario Roger Martin, quien estaba en la provincia de Corrientes al momento del hecho.

Los voceros de la investigación señalaron que el Cessna 206 siniestrado tenía capacidad para cinco personas, poseía "mucha tecnología" y "era 0 kilómetro prácticamente".

El fiscal Sergio Ríos, a cargo de la investigación, aseguró a la prensa que cuando llegó al lugar se encontró con "un amasijo de hierro y carne humana". "Ya nos hemos comunicado con la Junta de Investigación de Accidentes de Aviación Civil (JIAAC) y hemos hecho un resguardo de la escena, salvo la extracción de los cuerpos", aclaró.

Ríos explicó que los delincuentes ingresaron al hangar del aeroclub sirviéndose de un alicate. El grupo, añadió, contaba con "una logística muy importante" ya que lograron burlar una serie de alarmas "altamente sofisticadas".

"Cuando lograron entrar al hangar, desactivaron una cámara. Comenzó a sonar una alarma y la desactivaron. Había un segundo equipo de alarmas al que no pudieron acceder porque estaba oculto", detalló el fiscal. "Personalmente nunca había visto un teléfono satelital. Solo lo había visto en la serie de televisión 'Narcos'. Ese tipo de elementos permiten pensar en cierta organización", añadió.

El fiscal aseguró que pidió el registro de las cámaras de seguridad del hangar para tener más precisiones acerca de cómo se produjo el robo, por lo que, indicó, "tenemos esperanzas de identificarlos".