A pocas horas de que el Tribunal Oral en lo Criminal 1 de a conocer su veredicto sobre el crimen de Fernando Báez Sosa, el pueblo de Dolores se vuelca solidario ofreciendo alimentos y hospedaje a visitantes que llegaron especialmente a la ciudad para acompañar a los padres de Fernando en la sentencia del juicio por el crimen de su hijo. Incluso una vecina organizó una vigilia que inició en las últimas horas y en la que se hizo presente Graciela Sosa, la mamá de Fernando. 

“A la gente de Dolores nos ha movilizado terriblemente este caso”, dijo Carla Morelo, vecina de la ciudad, a la agencia Télam, mientras le ofrecía hospedaje a una señora que estaba frente a los tribunales judiciales. 

Carla calificó de “solidario” al pueblo de Dolores, ya que varios vecinos y comerciantes se pusieron a disposición de los padres de Fernando, Graciela y Silvino. “Es importante el acompañamiento hacia ellos. El dueño del mercado de la esquina de donde están parando dio la orden de que no pagaran nada de lo que compren”, aseguró la mujer.

Morelo, que es madre de dos hijos adolescentes, opinó que "nadie está libre de que le pase lo mismo” que al matrimonio Báez Sosa. “Como dolorenses compartimos el inmenso dolor de Graciela y Silvino. Es algo muy fuerte”, resaltó.

Los jueces darán a conocer este lunes la sentencia del juicio a los ocho jóvenes acusados de matar a golpes y patadas a Fernando Báez Sosa durante la madrugada del 18 de enero de 2020, a la salida del boliche Le Brique, en Villa Gesell.

El fallo de María Claudia Castro, Emiliano Lázzari y Christian Rabaia se conocerá a partir de las 13 en el primer piso de los tribunales dolorenses, donde se realizó el debate oral por el crimen entre el 2 y el 26 de enero últimos.

Los magistrados definirán la situación penal de Máximo Thomsen (23), Enzo Comelli (22), Matías Benicelli (23), Blas Cinalli (21), Ayrton Viollaz (23), y Luciano (21), Ciro (22) y Lucas Pertossi (23), que llegaron a juicio imputados por el delito de "homicidio agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas". 

En sus alegatos de cierre el último 25 de enero, tanto los fiscales Juan Manuel Dávila y Gustavo García como los abogados Fernando Burlando y Fabián Améndola, quienes representan a los padres de la víctima, consideraron acreditada la responsabilidad penal de los imputados.

Ambas acusaciones pidieron que los ocho jóvenes sean condenados a prisión perpetua, porque consideraron que fueron coautores del crimen, a diferencia de lo que indicaba el requerimiento de elevación a juicio, que apuntaba solo a cinco de ellos como agresores directos, aunque acusaba a todos los miembros del grupo por la presunta "coautoría funcional" del hecho.