La Fiscalía General de México denunció que los agentes a cargo del centro de detención migrante donde murieron 39 personas no hicieron nada para evacuar a los migrantes detenidos. Además, confirmaron que ya comenzaron a investigar a ocho personas por presunto homicidio. 

La titular de la Fiscalía General, Rosa Icela Rodríguez aseguró  que "no se ocultarán los hecho ni se protegerá a nadie". "En este gobierno se castigan abusos y violaciones a DD.HH.", escribió en su cuenta de Twitter.

Migrantes y militantes de derechos humanos  en Tapachula (frontera sur) y en la Ciudad de México protestaron contra las políticas migrantes y exigieron esclarecer las responsabilidades en el incendio en Ciudad Juárez (frontera norte).

Agentes federales y estatales entre los sospechosos

"Ninguno de los servidores públicos ni de los policías de seguridad privada realizaron alguna acción para abrirles la puerta a los migrantes que se encontraban adentro ya con el fuego", denunció en una conferencia de prensa la titular de la Fiscalía Especializada en Derechos Humanos, Sara Irene Herrerías.

La fiscalía identificó a ocho presuntos responsables: dos agentes federales, un agente estatal del INM, cinco agentes de una empresa de seguridad privada, precisó en la conferencia de prensa la secretaria de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez.

La fiscal Herrerías agregó que uno de los migrantes “es señalado por las mismas personas” que estaban detenidas por iniciar el fuego. Además, pidió a los jueces cuatro órdenes de captura en el hecho que investigan como “homicidio”.

La secretaría también actualizó el número de fallecidos que pasó de 38 a 39 y precisó que hay 27 personas lesionadas, seis de suma gravedad, diez en estado grave y nueve delicados.

La versión de las autoridades es que el incendio comenzó luego de que migrantes prendieron fuego a colchones en protesta por su posible expulsión. Más temprano, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que no va haber impunidad en el caso de los migrantes que murieron al interior de la estación del Instituto Nacional de Migración en Ciudad Juárez.

En la estación incendiada se hallaban ciudadanos de Guatemala, Venezuela, El Salvador, Honduras, Ecuador y Colombia, aunque el gobierno ecuatoriano aclaró que no había nacionales suyos.

La fiscal mexicana incorporó a la investigación el video de una de las cámaras de seguridad del centro de detención migrante para determinar la posible responsabilidad de agentes federales y estatales.

Las imágenes muestran el momento en el que comienzan a propagarse las llamas mientras las personas que estaban afuera de las celdas no hacían nada para auxiliar a los detenidos.

Solidaridad migrante

Los familiares y amigos de las víctimas todavía no saben las nacionalidades de los fallecidos. "Es lo que queremos saber, si estaban allá adentro o no", declaró el venezolano Gilbert Zabaleta, quien busca a sus amigos Daniel y Óscar.

Decenas de personas protestaron frente a la Secretaría de Gobernación en la Ciudad de México. Desde allí denunciaron las políticas migratorias y el trato que reciben los migrantes y exigieron que se determine si las muertes fueron responsabilidad del Estado.

Gabriela Hernández, coordinadora del albergue Casa Tochan, aseguró que “la estación migratoria y los (trabajadores) que estaban ahí son unos asesinos”. “De eso no nos cabe la menor duda”, reforzó.

También hubo protestas de migrantes en la fronter sur de México. Activistas y migrantes se acercaron a una estación migratoria en Tapachula, Chiapas, una localidad fronteriza con Guatemala.