Siete personas murieron y otras seis resultaron heridas hoy domingo en la ciudad estadounidense de Brownsville, Texas, fronteriza con México, al ser embestidas por un vehículo frente a un centro de recepción de migrantes. La mayoría de las víctimas son de nacionalidad venezolana de acuerdo al director del refugio, Víctor Maldonado.

El conductor del vehículo "atropelló a varias personas que esperaban en una parada de colectivo" en Brownsville, dijo el vocero de la policía local, Martín Sandoval, a un canal de la cadena ABC. Testigos presenciales retuvieron al conductor hasta la llegada de las fuerzas de seguridad. Luego fue detenido y está recibiendo tratamiento. Por el momento se niega a declarar

El hombre será procesado por conducción peligrosa pero es "más que probable" que se presenten cargos adicionales, informó Sandoval. Las autoridades iniciaron una investigación para saber si el accidente fatal fue accidental o intencional. Sandoval indicó que se trata de un individuo de origen hispano y que los testigos dijeron que el vehículo pareció haber perdido el control, sin respetar la señal del semáforo en rojo.

El director del refugio en Texas indicó que los migrantes atropellados procedían de Venezuela y habían llegado al albergue hace unos dos o tres días. El centro frente al que ocurrió el incidente recibe a migrantes debido a "la afluencia actual" de personas que cruzan la frontera desde México, explicó Sandoval. El lugar está preparado para alojar y alimentar a 200 personas mientras logran un alojamiento definitivo.

El incidente tuvo lugar cuando las autoridades en Estados Unidos se preparan para el levantamiento de una medida sanitaria conocida como "Título 42", que por la pandemia de covid-19 permitió a los agentes de la patrulla fronteriza deportar o rechazar a los migrantes sin siquiera aceptar sus solicitudes de asilo. 

El inminente vencimiento de la norma hace que las autoridades teman un aumento en el número de inmigrantes que ingresan ilegalmente a Estados Unidos. Frente a ese escenario se desplegarán en la frontera 1.500 militares estadounidenses para apoyar a los agentes de la patrulla fronteriza.

Seguí leyendo