El eslogan de campaña del Frente de Izquierda de los Trabajadores no apela a emociones, como hoy parece estar de moda, sino a una cuestión con la que gustan definirse en la escena política: "La izquierda tiene que estar". ¿Por qué? "No es una arrogancia, sino que debemos estar para jugar un rol de combate y defensa de los intereses populares que falta mucho en el Congreso y en el Concejo", planteó el sociólogo Octavio Crivaro, candidato a diputado nacional.

"Es que Virginia Grisolía en el Concejo no hubiera votado endeudar a los rosarinos para hacer obra pública. Hubiera dicho que hay plata pero no la quieren tocar porque es la de los empresarios, porque el socialismo y Ciudad Futura entran en un discurso bastante macrista porque para hacer obras hay que endeudarse con JP Morgan. Porque si yo entrara al Congreso pelearíamos por declarar la emergencia en violencia de género y se trate el derecho al aborto libre y gratuito", amplió en diálogo con Rosario/12.

Crivaro considera que el escenario de campaña es "raro" porque los principales candidatos -entiende- "son desconocidos para los votantes y en el cuarto oscuro habrá 57 papeles, algo inédito". En cuanto al FIT, confía en que Grisolía esta vez supere la barrera de 300 votos que le faltaron en 2015 para ser concejala. Para el Congreso, el desafío es más delicado: la izquierda pone en juego tres de las cuatro bancas que tiene. "Creo que será una de las mejores elecciones de la izquierda. El vuelco de Nicolás Del Caño a provincia de Buenos Aires es un acierto, por el reconocimiento popular en la lucha de los trabajadores de Pepsico, por estar junto a la lucha popular y no a mirar el conflicto desde una oficina. Ese conflicto permitió ver a qué nos jugamos y a qué debemos prepararnos si en octubre el gobierno de Macri sale fortalecido".

En ese sentido, Crivaro asume que el Ejecutivo avanzará con sus proyectos de reformas laboral y previsional. "Por eso hay que decirles que hasta acá llegaron y no ayudar el plan macrista votándole el presupuesto y el pago a los buitres, como lo han hecho. El voto al FIT es un llamado a los que creen que se viene una situación complicada".

--¿Por qué entonces el voto popular es acaparado por el peronismo y no por la izquierda?

-Todavía estamos pagando costos de la derrota del '76, y además militamos contra estructuras que diariamente trata de consolidar el rol de la burocracia sindical, las represnetanciones tradicionales. Por cada minuto que nuestros referentes tienen en la televisión, los demás tienen dos horas. Es una construcción del sistema a través de los grandes medios y de los sindicatos que prohíben prácticamente las oposiciones, tratan de frenar el avance de la izquierda".

--La frontalidad del discurso de izquierda está perdiendo frente a las apelaciones al optimismo, la emotividad, cero propuesta.

--El duranbarbismo penetró varios partidos. Cristina hace campaña así, poniendo agraviados pero no voluntad de combate, pone víctimas del sistema pero no dice adonde ir, incluso los manda a San Cayetano. Todas las campañas de Rosario son calcadas, abrazan a un pobre, unos reparten globos, otros dulce de leche. Eso se caerá cuando el alimento para mascotas o el dulce de leche de tambos combativos no den respuestas a los ataques que vendrán: fábricas cerradas, despidos. Nosotros hablamos con contenido en una campaña que está muy vaciada, y defendemos derechos en la calle cuando otros se borran.

--¿Qué posición tienen frente al reclamo de Casa Gris acerca de la deuda de Nación?

--Hay que rediscutir tanto la coparticipación como la participación de Santa Fe y las otras provincias en el Congreso porque está sub representada. Obviamente, no apoyamos hacer una causa provincial atrás de un gobernador que discute coparticipación pero no le quiere cobrar Ingresos Brutos a las empresas sobre el río que se llevan sus ganancias a Europa. Hay que discutir pero a favor de los de los trabajadores que viven en villas cada vez más grandes, que no tienen infraestructura de servicios en sus hogares a pesar de los 10 años de crecimiento que hubo en la provincia y que a ellos no les llegó.

--¿Cuál es tu agenda propia, tus proyectos para el Congreso?

--Estamos haciendo eje en violencia de género y derecho al aborto. Y peleando por leyes que impidan los despidos. El ideal de Macri es un sector que labure 14 horas con un sueldo chino y otro sector esté en la casa presionando a la baja del salario de su hermano: desocupación industrial del 20%.