Luego de que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, amenazara con un ataque militar a Venezuela varios gobiernos de América Latina rechazaron el posible uso de la fuerza contra el país sudamericano. 

El Mercosur emitió un comunicado donde si bien rechazan el uso de la fuerza continúan defendiendo la decisión de suspender a Venezuela como estado miembro del bloque. Una medida que bien puede considerarse como una agresión aunque no de la magnitud que propone el presidente norteamericano.

La Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay emitieron un nuevo documento donde continúan con su desconocimiento del gobierno constitucional de Venezuela que encabeza Nicolás Maduro al insistir con que se quebró el orden democrático. "El gobierno venezolano no puede aspirar a una convivencia normal con sus vecinos en la región hasta que no se restablezca la democracia en el país", advirtió el grupo de países en un comunicado que difundió la Cancillería argentina.

"Los países del Mercosur continuarán insistiendo individual y colectivamente para que Venezuela cumpla con los compromisos que asumió, de manera libre y soberana, con la democracia como única forma de gobierno aceptable en la región", aseguró el comunicado que más allá del rechazar el uso de la fuerza como propuso Trump, no abandona la política de hostigamiento contra Venezuela y el gobierno de Maduro que inició el entonces presidente norteamericano Barak Obama y que profundizó Trump. 

Por último sostiene que "los países del Mercosur consideran que los únicos instrumentos aceptables para la promoción de la democracia son el diálogo y la diplomacia".

En tanto, el Ministerio de Relaciones Exteriores Colombia también rechazó las "medidas militares y el uso de la fuerza en el sistema internacional", y que "todas las medidas deben darse sobre el respeto de la soberanía de Venezuela a través de soluciones pacíficas".

La Cancillería mexicana también rechazó el uso o la amenaza de uso de la fuerza en las relaciones internacionales y también a través de un comunicado afirmó que "la crisis en Venezuela no puede resolverse mediante acciones militares, internas o externas".

El presidente de Bolivia, Evo Morales, aseguró desde su cuenta de Twitter que "ante la amenaza de intervención armada de Trump contra Venezuela, la derecha local e internacional guarda ruidoso silencio cómplice", dijo para luego agregar que "condenamos afán intervencionista armado de EEUU contra Venezuela, país que busca la paz en diálogo en Constituyente y elecciones regionales".

Hacia el interior de Venezuela, la amenaza de Trump ha provocado una fractura en el bloque opositor. Por caso, Henri Falcón, dirigente del partido opositor Avanzada Progresista, repudió las amenazas contra el pueblo venezolano por parte de Trump.

"Yo me desmarco de cualquier Intervención militar promovida por los EE.UU al costo que sea! ¿Dónde están los líderes que la apoyan? Que hablen", expresó a través de su cuenta de Twitter donde también rechazó los ataques y cuestionamientos que ha recibido por deslindarse de las otras fuerzas políticas de la oposición que respaldan la intervención militar.